El pasado 2 de diciembre Benavente decía adiós a Ángel Manteca de una forma trágica, y es que el empleado municipal caía al suelo en los campos de fútbol Alonso Pimentel y fallecía de forma fulminante.

Los hechos conmocionaron a la sociedad benaventana y en concreto l mundo del deporte, pues era una persona muy ligada al deporte benaventano, especialmente al fútbol sala.

Por este motivo durante la jornada de ayer el Ayuntamiento de Benavente ha querido rendirle homenaje colocando una placa en el pabellón de La Rosaleda y reconociendo así su valía profesional y personal vinculada al deporte durante sus treinta años de servicio.