El fenómeno misterioso y fascinante que también nos perderemos en Zamora por el coronavirus
Un fenómeno que ocurre dos veces al año coincidiendo con el equinoccio de primavera y de otoño y que cada año congrega a cientos de visitantes fascinados por el misterio, la ciencia y todas las hipótesis que lo rodean, éste es el fenómeno de la Luz Equinoccial que tiene lugar en el Monasterio románico de Santa Marta de Tera.
Desde hace seis años el fenómeno se complementa además con un concierto, que estaba previsto para el 21 de marzo y que la organización se ha visto obligada a suspender siguiendo las recomendaciones sanitarias por el coronavirus.
Es una pena que turistas y zamoranos se pierdan cómo la luz penetra por un óculo de la cabecera del Monasterio e incide directamente sobre el capitel izquierdo, muy semejante a otro fenómeno que ocurre en una localidad burgalesa en la que un rayo de luz incide sobre la escena de la Anunciación.
Pero ahora toca la prevención y habrá que esperar a otoño para que este fenómeno vuelva a deslumbrar en Santa Marta de Tera.
Existen varias teorías sobre la Luz Equinoccial de Santa Marta, desde que el alma de Santa Marta asciende a los cielos en una almendra mística sujetada por Los Ángeles, o que es el alma de cualquier cristiano sincero para recordar a todos los fieles cuál es el camino por el que se entra el reino de los cielos, hasta que es la resurrección de Cristo.