Después de años de trabajo "duro e intenso", la multinacional Magdala hace público que el proyecto de la Biorrefinería Multifuncional de Barcial del Barco ha conseguido captar inversores para su financiación. La empresa tiene comprometida una inversión de 163.481.136 euros (178,080,000.00 dólares), con inversores extranjeros, para la ejecución y puesta en marcha de esta industria renovable.
Todo ello enfocado en un momento de recuperación económica verde post Covid-19 y en línea con las directrices que se están marcando desde la Comisión Europea y el propio Gobierno de España.
Este hito había sido el principal obstáculo para los emprendedores del proyecto, dado que son necesarios cientos sesenta millones de euros para la construcción y puesta en marcha de la primera fase industrial.
La Biorrefinería Multifuncional de Barcial del Barco va a producir 160.000,00 metros cúbicos de bioetanol y 120.000 toneladas de piensos con un sistema multifuncional, patentado por un ingeniero español, que permite producir bioetanol de alta eficiencia y menos contaminante que los combustibles fósiles, a la par de piensos para el canal ganadero. Todo ello usando como materias primas: remolacha, biomasa y maíz en un radio de 50 km desde la localización de la planta. Así habrá una mínima necesidad de hectáreas y se operará sin incidir en el canal alimentario.
El proyecto está alineado con las nuevas directrices europeas de reducción de CO2, ya que según el reporte Globiom, elaborado por consultoras independientes, a petición de la propia Comisión Europea, tanto el maíz como, sobre todo, la remolacha y la biomasa, son materias primas a partir de las cuales se produce un bioetanol que reduce emisiones frente a combustibles fósiles.
Un proyecto muy deseado
Un total de 133 ayuntamientos de las provincias de Zamora, León y Salamanca han firmado un manifiesto a favor del proyecto. Todas las organizaciones agrarias: UPA, COAG, Asaja, UCCL se han manifestado a favor de este desarrollo verde. El proyecto es igualmente apoyado por los sindicatos de clase: CCOO y UGT. También las Universidades de Salamanca y León así como los Colegios Profesionales de Ingenieros Industriales de Zamora y León han avalado este desarrollo.
La planta supone un nuevo modelo industrial, verde, que transformará la región castellano y leonesa, creando unos 2.000 puestos de empleo indirecto y cien directos (en una primera fase). Contribuirá a la descarbonización del planeta y volverá a dar al campo unos beneficios hoy inexistentes para un cultivo endógeno y social, como es la remolacha, actualmente en pleno retroceso. Ya hay interés en otras partes de Castilla y León e incluso, en otros países, para construir una segunda y tercera planta. En esta dirección desde EA Green Energy se está valorando la Robla (León) como zona II de desarrollo industrial.
Los promotores cuentan con el compromiso firme de inversores institucionales de EE.UU y con el respaldo de aseguradoras, de prestigio internacional, que han asegurado el proyecto industrial.
Alcanzado este compromiso de financiación, los promotores del proyecto están cerrando el acuerdo de construcción con alguna de las más importantes constructoras españolas y negociando el cierre de un banco, con sede en España, para ser el custodio del capital. En esta fase, los promotores cuentan con el apoyo del Gobierno de España y de la Junta de Castilla y León a quienes ya se les ha hecho llegar el compromiso inversor, de forma expresa.