CCOO y UGT, sindicatos mayoritarios en Correos, denuncian que, en la provincia de Zamora, miles de ciudadanos/as que viven en el ámbito rural verán recortado el servicio postal durante los meses de verano. La empresa comunicó la decisión de no realizar contrataciones para cubrir las vacaciones de los trabajadores/as de los servicios rurales y, por ello, los ciudadanos/as que residan en los pequeños municipios recibirán el correo solo algún día a la semana, cuando por ley la empresa debe garantizar que el servicio postal se realice cinco días a la semana, de lunes a viernes, en todo el territorio nacional, sin distinción del lugar donde se resida.

"El recorte en contratación para cubrir las ausencias durante el verano es casi absoluto en todos los centros de trabajo, generando en todas las poblaciones un deterioro del servicio público, tanto en el reparto como en la atención al público, dado que es imposible asumir todo el trabajo. En la práctica estamos ante una medida de recorte de la plantilla que diariamente presta este servicio público, y como solución la empresa ha comunicado que los trabajadores/as que no estén de vacaciones realicen el trabajo de los que falten. Con la fórmula elegida se genera una sobrecarga de trabajo, por lo que la empresa asume que quedarán sin reparto aleatoriamente unas zonas u otras, al resultar imposible llegar a todos los domicilios. En el caso de los servicios rurales, la empresa condena a que diariamente queden sin servicio postal municipios enteros, algo que además de deteriorar el servicio que recibe el ciudadano/a, en este caso, es una medida ilegal al haberse impuesto a los trabajadores/as sin posibilidad de negociación previa", denuncian.

"A pesar de que Juan Manuel Serrano, el presidente de la compañía, gasta mucho dinero en campañas publicitarias para vender su preocupación por el mundo rural y la España vaciada, la realidad evidencia que el servicio público postal en este ámbito parece no encajar en el proyecto de futuro que está aplicando. Estamos ante un gestor que ha demostrado sus carencias y falta de talante durante la crisis sanitaria del coronavirus, llevando a Correos a ser el segundo colectivo laboral en infectados después del sanitario, y que ahora busca recortar gastos dejando de cubrir las vacaciones de buena parte de los más de 5.400 trabajadores y trabajadoras que en Correos dan cobertura al mundo rural, un ámbito territorial donde se encuentran el 90% de los municipios de todo el territorio. La decisión precariza aún más las condiciones en las que se encuentra este colectivo, que en su gran mayoría están obligados a aportar sus propios vehículos para realizar el servicio, a cambio de unas compensaciones que llevan congeladas prácticamente los últimos 18 años, mientras el coste de los vehículos y su mantenimiento se han incrementado un 35%".



CCOO y UGT han pedido a la empresa que rectifique, y que cubra con contratación todos los servicios rurales, como de hecho históricamente siempre se ha hecho, ya que existe una obligación de servicio público que no puede dejar de atenderse. Para ambas organizaciones sindicales, si el presidente quiere ahorrar, en vez de recortar el servicio público a la ciudadanía en el mundo rural, podría gastar menos en las costosas campañas de publicidad con las que solo busca una promoción de su imagen personal.