No era una noche de un verano cualquiera. Tampoco una ciudad de Toro como la conocíamos. Todo era especial, desde la pandemia vivida -azotando de lleno a los toresanos- como la situación que se vive en este momento. Pero el Ayuntamiento, presidido por el joven Tomás del Bien, tiró para adelante, como se dice por estas tierras, y ha organizado un auténtico elenco de actuaciones de primer nivel en su celebrado y aplaudido programa cultural las 'Noches de Toro'.

En un marco inigualable, auténtico, como es la histórica Plaza de Toros, se presentaba un genio del zapateo, de la danza, de la máxima expresión del flamenco bailado, nada más y nada menos que el Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes 2016, Rafael Amargo. Con todas las normas de seguridad marcadas por las autoridades sanitarias completas, con el coso taurino convertido en platea con sillas y distancias de seguridad, con mascarillas la totalidad del público -nadie de pié, por cierto-, el brujo de la danza andaluza hizo su aparición por bulerías. Comenzaba el espectáculo en una noche de auténtica placidez climática. Todo estaba preparado para que la Plaza de Toros se conviertiera en anfitriona de la dulzura y el sentimiento.

Vestido de grana, porque el oro estaba en su rostro y sus pies, el granaíno (Granada, 1975) se comió el escenario con esa expresión única, de raza, de fuerza, esos movimientos que parecen rayos de verano y el zapateo que simula la danza del andaluz puro acorde a cada palo. Amargo, a pesar del parón por estos meses de pandemia, sigue derrochado energía, fuerza, vitalidad. Sí, es uno de los grandes bailarines, pero también coreógrafos. Todo en el escenario es estética, arte, teatro bailado y cantado. Es el espíritu de Federico García Lorca que se expande por los rincones. El amor brujo de una noche de verano.

Sí, Rafael Amargo es artista, si su íntima Lola era la 'Faraona', Rafael es el 'Faraón' del tablao. Artista ecléctico y arriesgado, capaz de adaptarse a un escenario reducido -como en la Plaza de Toros de Toro- como un gran espectáculo. Ese lorquiano que prepara junto a Antonio Canales y se llama 'Yerma'. En Toro, aunque 'de pasada', dejó su maestría del más puro flamenco, pero también otras tendencias más modernas pero sin perder esa esencia del flamenco.

Sin mayores alardes, con las palmas, la guitarra flamenca, la caja y las voces deleitó al entregado público con zapateos, suyos y de las dos bailarinas. Bulerías, soleás, seguiriyas, alegrías y también algún tango y, cómo no, el romance del Guadalquivir, la dulce Sevilla recitada y bailada por un Amargo encantador.

La fuerte carga emocional que pusieron los artistas sobre el escenario durante sus interpretaciones y el ambiente creado en el tablao, hacen que estos espectáculos, y más de la mano de uno de los más grandes, sea una experiencia muy recomendable, pero más emotiva.

Noches de Toro

La ciudad de Toro se prepara para vivir intensamente una nueva edición de Las Noches de Toro, una cita mágica con la música y la cultura que en este 2020 se celebrará con todas las medidas de seguridad que requiere la excepcional situación sanitaria. La cita contará con artistas de la talla de Rafael Amargo, Tamara, Huecco, Luar Na Lubre, Luis Pastor, Sofía Ellar y el espectáculo Frozzen, el musical...

Consulta todos los detalles: NOCHES DE TORO 2020