El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha visitado esta mañana la nueva estación depuradora de aguas residuales (EDAR) que dará servicio a las localidades de Moraleja del Vino y Casaseca de las Chanas, en la provincia de Zamora, con una población equivalente de 3.000 habitantes. La inversión de la Junta en esta nueva infraestructura ha ascendido a 1,5 millones de euros; los dos ayuntamientos han aportado 250.000 euros y Somacyl gestionará la nueva EDAR durante 25 años. 

En este acto, el consejero ha confirmado las previsiones de la Junta de construir más de 300 infraestructuras de depuración en la Comunidad, en municipios de entre 500 y 2.000 habitantes equivalentes, en las que se estima una inversión global de 125 millones de euros, con la colaboración de las diputaciones y los municipios. De ellas, 42 instalaciones están planeadas para la provincia de Zamora, con una inversión aproximada de 20,4 millones de euros.

La nueva depuradora, que ya da servicio a las localidades de Moraleja del Vino y Casaseca de las Chanas, dispone de un caudal medio diario de 611 metros cúbicos, con un caudal punta de entrada de 152 metros cúbicos a la hora, que podrá dar servicio a una población de 3.056 habitantes equivalentes. El tratamiento es de fangos activos y el conjunto de la instalación cuenta con dispositivos de automatización y control, con controladores programables. Las obras han incluido la urbanización de la parcela, la construcción de viales interiores, jardinería, acondicionamiento del entorno y cierre perimetral. La Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) gestionará la nueva EDAR durante 25 años.

El consejero de Fomento y Medio Ambiente –acompañado por la alcaldesa de Moraleja del Vino, Eva María Calvo, y el alcalde de Caseca de las Chanas, Domingo Gabella, además del director general de Carreteras e Infraestructuras, Jesús Puerta; la delegada territorial de Zamora, Clara San Damián; el consejero delegado de Somacyl, José Manuel Jiménez, o el vicepresidente primero de la Diputación de Zamora, José María Barrios-, ha destacado el importante avance que supone la puesta en funcionamiento de esta infraestructura que, en la provincia de Zamora, supone prácticamente completar el mapa de depuradoras que la Junta de Castilla y León tenía asignadas en localidades de más de 2.000 habitantes equivalentes -a falta de terminar la actuación en la localidad de Alcañices-, según el Plan Nacional de Calidad de las Aguas.

Este Plan asignaba a la Junta de Castilla y León la construcción de las instalaciones de Benavente, Fuentesaúco, Puebla de Sanabria, Tábara, Toro, Villalpando, Zamora, Santa Cristina de la Polvorosa, Galende-Cobreros, Morales de Toro, Moraleja del Vino y Alcañices, todas terminadas excepto esta última cuyas obras empezarán de forma inminente.  La inversión global ha ascendido a 42,7 millones de euros.

A la Administración General del Estado, por su parte, le correspondía intervenir en las instalaciones de Fermoselle, San Cristóbal de Entreviñas, Coreses, Villaralbo y Villanueva del Campo, completando así el mapa de depuración de localidades de más de 2.000 habitantes-equivalentes.



300 nuevas depuradoras en municipios entre 500 y 2.000 habitantes equivalentes

Además, Juan Carlos Suárez-Quiñones ha avanzado el compromiso de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de llevar a cabo en esta legislatura alrededor de 300 actuaciones de depuración en Castilla y León, en municipios de entre 500 y 2.000 habitantes equivalentes, con una inversión aproximada de 120 millones de euros, en el marco de un acuerdo con las nueve diputaciones provinciales. De estas 300 actuaciones, 42 están previstas en la provincia de Zamora, con una inversión estimada de 20,4 millones de euros.

El acuerdo con las nueve diputaciones, que se documentará en próximas semanas, contempla una financiación según la cual la Junta aporta el 40 %, la Diputación, otro 40 % y los ayuntamientos, el 20 %; asimismo, la Junta posibilita financiar el 50 % de la Diputación a 10 años y el 20 % de los ayuntamientos a 25 años; además, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente se encargaría de la gestión de estas infraestructuras de saneamiento durante 25 años.

“Todas estas actuaciones buscan conseguir el objetivo de cero aguas sin depurar, algo que la Junta de Castilla y León está dispuesta a conseguir a lo largo de esta y la próxima legislatura, en la que se ejecutaría la depuración de los núcleos de menos de 500 habitantes equivalentes”, ha remarcado Suárez-Quiñones.