El Comité de Empresa de Galletas Siro en Toro arrancaba esta madrugada la segunda jornada huelga de carácter intermitente, que se repetirá también los días 16 y 23 del próximo mes de junio. Una movilización que afecta a unos 300 empleados de la factoría toresana y que se iniciaba en mayo tras la ruptura de negociaciones para la modificación de su convenio colectivo.
Según ha podido saber El Español-Noticiascyl, desde el Comité califican la acogida de estos paros como de "éxito", por el nivel de seguimiento de sus trabajadores. Durante los primeros turnos de entrada a la fábrica, apenas algunos trabajadores eventuales han accedido a las instalaciones, mientras que casi la totalidad de los empleados están apoyando estas movilizaciones. Y luego por la tarde, los piquetes han contado con el apoyo y solidaridad del Comité de Empresa (CCOO) de Aguilar de Campoo, donde también hay una importante fabrica de Cerealto-Siro, que se han desplazado hasta Toro para protestar con sus compañeros.
La huelga tiene una duración de dos horas en cada uno de los tres turnos de trabajo diarios. Los trabajadores aseguraban hace unas semanas que "se han agotado" todas las vías de negociación, incluido el SERLA, para conseguir un incremento "digno" de los salarios. Y es que, la empresa les ofrece el 0,8 por ciento para el año 2020 y el 1,2 por ciento para el año 2021. Algo que el Comité no acepta y que ha llevado a optar por la vía de la reivindicación y "la lucha", ya que que consideran que "la negociación está enquistada por la tozudez de la empresa".
Por su parte, Cerealto Siro Foods aseguraba que las negociaciones con el Comité de Empresa se han prologado durante más de un año, "con la voluntad de ser competitivos de cara a garantizar el nivel de actividad de dicha planta y, por consecuencia, el empleo de la misma, pero sin ser ajenos al contexto de incertidumbre económica y sociolaboral internacional sin precedentes derivado de la pandemia" aseguraban en declaraciones a El Español-Noticiascyl.
La empresa galletera asegura que, durante toda la negociación del convenio, la actitud de la compañía ha sido "dialogante, cercana y transparente", y buscando siempre "las mejores condiciones posibles" para los trabajadores de la factoría toresana. Cerealto Siro Foods asegura haber hecho "un último esfuerzo" para acercar posturas y mantienen estar "abiertos" a seguir negociando con los representantes sindicales este proceso, "de cara a alcanzar las mejores condiciones, siempre en un marco responsable que nos permita alcanzar la flexibilidad y competitividad necesarias para abordar los retos a los que nos enfrentamos y garantizar el nivel de actividad de la planta y el empleo".