La Guardia Civil de Zamora paralizaba una fiesta ilegal en la zona de bosques de Tábara con 200 personas, la madrugada del 14 al 15 de agosto, y que contaba con música e iluminación. Así lo ha confirmado el subdelegado del Gobierno en Zamora Ángel Blanco en su balance mensual de los controles para el cumplimiento de las restricciones sanitarias que realizan las Fuerzas de Seguridad.
En menos de una hora los agentes había disuelto la fiesta y se formularon 40 denuncias de diversa índole, por incumplimiento de la normativa COVID, así como por el consumo de bebidas alcohólicas en vía pública, negativa a la identificación o violación de la seguridad vial. Unas sanciones que se suman a las 380 totales que este me se han propuesto en la provincia de Zamora, muchas de ellas fruto de botellones y fiestas ilegales que se han ido detectando en el territorio, y que han contado con la activa colaboración ciudadana, como indicaba el subdelegado.
De hecho, una de las últimas intervenciones en la provincia ha sido la paralización de un botellón hace dos días en la zona del Cristo de las Batallas de Toro.