El Pleno de mañana viernes 10 de septiembre del Ayuntamiento de Zamora debatirá y someterá a votación la Cuenta General correspondiente al año 2020, cuyo resultado, aseguran, "refleja la buena gestión económica"  realizada por el equipo de Gobierno durante estos años y que "ha permitido afrontar momentos complicados" como los vividos con la actual crisis sanitaria generada por el covid-19 y sus repercusiones económicas, posibilitando dar respuestas desde el Ayuntamiento para intentar paliar sus efectos, con la inyección de 1.500.000 euros a través de los planes Relanza, las ayudas sociales o los bonos  de comercio solidario. Además, la buena situación de las cuentas municipales, ha permitido aumentar el gasto corriente en un 1.350.000 euros para limpieza y desinfección, medidas sanitarias, de control y vigilancia, etc.

Este aumento del gasto se ha realizado a pesar de un descenso en los ingresos de 1.500.000 de euros, derivado en parte por el descenso de la actividad económica, pero también por las decisiones tomadas por el equipo de Gobierno de flexibilización fiscal, como la supresión temporal de la ORA, la exención del pago de la tasa de terrazas o de la basura comercial, y que han supuesto en conjunto una reducción de ingresos de 687.000 euros.

Es decir, que en esta situación de crisis generada por el covid-19, se ha podido aumentar el gasto en más de 2.800.000 euros, a pesar de la reducción de ingresos corrientes de 1.500.000 euros, en un momento en el que las transferencias de la Junta de Castilla y León también se han reducido, y todo ello sin comprometer las cuentas municipales.

Otro aspecto a destacar que refleja la Cuenta General es el periodo medio de pago a proveedores por parte del Ayuntamiento que es de 4 días, uno de los más bajos de toda España, y que responde al buen trabajo municipal para pagar las facturas rápidamente y que el dinero llegue lo antes posible a los proveedores en esta difícil situación económica. Todo ello, supone "un importante esfuerzo" por parte del Ayuntamiento de Zamora para intentar paliar los efectos de esta crisis en la medida de lo posible.

La Cuenta General también muestra "el esfuerzo de los ciudadanos" a la hora de pagar sus tributos, reflejando el mismo porcentaje de pago en voluntaria que el año anterior, por encima del 95%.

El concejal de Hacienda, Diego Bernardo considera que la gestión de esta crisis "ha sido muy diferente a la gestión realizada en 2008 por otros equipos de gobierno de distinto color". Mientras que el actual equipo de Gobierno "ha optado por la flexibilización fiscal, la no subida de impuestos, el aumento de ayudas sociales, la concesión de ayudas directas a la hostelería y al comercio y el rápido pago a proveedores, con unas cuentas municipales saneadas, en 2008, se optó por una subida de impuestos del 30 %, la reducción de ayudas, el retraso incluso el impago a proveedores y los recortes sociales, que a pesar de todo ello acabaron llevando al Ayuntamiento a la Bancarrota, con una mala gestión económica desde 1995".

Mientras que el actual equipo de Gobierno "cogió un Ayuntamiento en Bancarrota en 2015", con la gestión llevada a cabo desde entonces "las cuentas se han saneado, permitiendo afrontar con determinación y solidaridad la difícil situación económica que nos ha tocado vivir en estos momentos".