Esta mañana han comenzado las obras de un nuevo proyecto de asfaltado con material bituminoso, que incluye el fresado y reposición del pavimento de medio centenar de calles en distintas zonas de la ciudad, con un presupuesto de 900.000 euros. Este proyecto incluye las calles que quedaron sin ejecutar en el plan de asfaltado de 2018 como consecuencia del abandono de la empresa adjudicataria, lo que dio origen a un proceso administrativo de rescisión del contrato.
El proyecto incluye la intervención en calles y plazas repartidas por las distintas zonas de la ciudad, incluido el barrio de Carrascal y diversas glorietas que han ido deteriorándose durante los últimos años, tanto en el interior de la ciudad como en la travesía de Cardenal Cisneros. En este caso se incluyen las rotondas con la carretera de la Hiniesta, con la N-630 y con el centro comercial Valderaduey, además de las glorietas e intersecciones de la Plaza de Alemania, de Cristo Rey, de la calle de Villalpando con la cuesta del Bolón, de la carretera de la Estación con la avenida de Federico Cantero Villamil, y de la Puerta de la Feria. El proyecto contempla también la reparación de varios tramos del carril derecho de la carretera de La Aldehuela, el paseo de la Concha, el paseo de las Vistillas, la avenida de la plaza de toros, la bajada de la Barriada de Asturias, las plazas de las Dueñas y Prosperidad, los accesos al bosque de Valorio, y las calles de Santa Cecilia, El Reto, doctor Fleming, San Blas, Almendro, del Tejo, San Benito, Libertad, Brahones, Colón, Pedro Alvarado, Argentina, Grijalba, Dornajo, San Ramón, Prado Redondo, del Rollo, Aldaras, del Castro y Monte Concejo. En barrio de Carrascal se asfaltará la plaza de la iglesia y otras calles adyacentes, sí como un tramo de la carretea de Carrascal en la salida de la capital.
Los trabajos, incluyen el fresado de un espesor de entre cuatro y cinco centímetros del asfaltado existente, que se encuentra considerablemente deteriorado, y la posterior pavimentación con material bituminoso en caliente. Una actuación que se completa con la reposición de las marcas viales y espacios de aparcamiento, así como de los bordillos, pozos de registro o rejillas de sumideros que se ven afectados.
Hay que tener en consideración que durante la ejecución de los trabajos, que tienen un plazo de previsto de tres meses, será necesario el corte al tráfico rodado en los tramos afectados, por lo que se señalizarán convenientemente los desvíos por parte de la empresa adjudicataria de las obras, con la asistencia de la Policía Municipal. No obstante, estos cortes serán por el periodo mínimo imprescindible, estableciendo en algunos casos el tránsito alternativo por alguno de los carriles de la calzada cuando ello sea posible.
Este es el segundo programa de asfaltado de calles que lleva a cabo el Ayuntamiento este año, después de que antes del verano se llevara a cabo el proyecto ordinario previsto para 2021 de reposición de pavimento bituminoso, con la intervención en una veintena de calles, con un presupuesto de medio millón de euros.