El Consejo de Gobierno de la Junta ha autorizado la firma de un convenio con el Ayuntamiento de Zamora para la rehabilitación y ampliación del edificio ubicado en la manzana delimitada por la avenida Cardenal Cisneros y las calles Juan Sebastián Elcano y Corbeta de Zamora para su uso como centro cívico. El coste total estimado de las actuaciones es de 6.221.526 euros, de los que el 65% será financiado por la Consejería y el 35% restante por el Ayuntamiento de Zamora.
El convenio establece que la Consejería de Fomento y Medioambiente aportará el 65% del importe del coste total de las obras, 4.043.992 euros, y actuará como órgano de contratación y de inspección y coordinación de seguridad y salud, y gestionará la cesión del uso del inmueble y su parcela al Ayuntamiento de Zamora. El Ayuntamiento, por su parte, aportará el 35% del importe del coste total de las obras, 2.177.534 euros.
El edificio es propiedad de la Junta de Castilla y León, adscrito a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente; está situado en la manzana delimitada por la Avenida Cardenal Cisneros y las calles Juan Sebastián Elcano y Corbeta, constituye un raro ejemplo de la tendencia de ‘arquitectura brutalista’ en hormigón de los años 60-70 del pasado siglo, que resulta singular en la ciudad de Zamora e incluso en el conjunto de la Comunidad, por la escasa difusión de dicha tendencia en nuestro ámbito geográfico.
En la actualidad, tanto el edificio como la parcela que lo alberga permanecen cerrados y sin uso, tras su destino como centro de control de calidad de la obra pública dependiente de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, lo que empobrece la imagen urbana del barrio, genera problemas de salubridad y seguridad públicas, y a medio plazo determinará el deterioro y consecuente ruina del edificio.
El Ayuntamiento de Zamora ha venido insistiendo en la necesidad para la ciudad de contar con un centro cívico que permita albergar actividades de interés para los zamoranos, tanto de carácter social como cultural, y en particular que pueda servir de sede y base de actuación para las numerosas asociaciones vecinales que de forma creciente articulan la sociedad civil zamorana.
Así, tanto el Ayuntamiento como la Junta de Castilla y León consideran que el mismo, con la parcela que lo alberga, constituye un emplazamiento ideal para un centro cívico, dada su situación en un barrio necesitado de dotaciones urbanísticas, lo que permitirá, además, la recuperación y reutilización de un edificio ahora sin uso, pero con valores arquitectónicos relevantes.