El obispo de Zamora, Fernando Valera tendrá la oportunidad de encontrarse con el Papa Francisco en Roma. Será durante su participación del 24 al 29 de enero en la visita ad limina apostolorum en Roma junto a otros 19 obispos españoles. Monseñor Valera estará acompañado por el vicario general, César Salvador; y el provicario de la diócesis, Pedro Faúndez. Juntos formarán parte del cuarto y último grupo de obispos españoles que han acudido en las últimas semanas a Roma en visita ad limina. Este grupo de prelados españoles lo componen los obispos de las provincias eclesiásticas de Valladolid, Toledo, Madrid y el ordinario castrense.
¿Qué es una visita ad limina?
La visita ad limina es aquella que han de realizar todos los obispos católicos, cada cinco años, a Roma. Allí, llevarán a cabo una peregrinación a las tumbas de los apóstoles Pedro y Pablo como expresión de comunión eclesial y el encuentro con el Papa como sucesor de san Pedro. “Es volver y recordar nuestra identidad como parte de la Iglesia”, explica el vicario general en un comunicado emitido por la Diócesis de Zamora.
Durante esta visita, Fernando Varela informará de la situación de la iglesia en la la Diócesis de Zamora, pero previamente, los zamoranos enviaron hace algunas semanas un informe de más de 200 páginas con la descripción y datos objetivos de la iglesia particular de Zamora, así como algunas valoraciones sobre aspectos concretos. “Este documento se ha elaborado a través de las distintas vicarías y delegaciones diocesanas para que de esta manera el Santo Padre pueda tener una visión amplia de la realidad de la diócesis”, añade el vicario.
Primera visita de monseñor Valera
El Papa Francisco se había visto obligado a suspender estas visitas a causa de la situación provocada por la pandemia de la Covid-19. La última visita ad limina de los obispos españoles fue en el año 2014, en el primer año de pontificado del papa Francisco. Por este mismo motivo, el obispo de Zamora no ha tenido ocasión, hasta este momento, de encontrarse con el Santo Padre tras su nombramiento y toma de posesión como prelado de la diócesis. “Me produce una gran alegría acudir a Roma ya que por la pandemia no pude ir tras mi toma de posesión. Por otra parte, es una alegría experimentar estos días de comunión con el Santo Padre y con el resto de obispos”, apunta Fernando Valera en un comunicado oficial.
La visita ad limina de los obispos españoles incluye la celebración de la eucaristía en las cuatro basílicas mayores de la cristiandad en Roma, la visita a algunos dicasterios (oficinas y departamentos de las distintas áreas de trabajo de la Iglesia Católica), la recepción en la Secretaría de Estado y en la Embajada de España ante la Santa Sede; y por último la audiencia del obispo con los obispos.