El subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, ha anunciado este mediodía que se tomarán medidas para frenar los comportamientos "incívicos, encaramientos y agresiones verbales y presuntamente físicas" del sin techo en silla de ruedas que deambula por la capital.
Si hace una semana, EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León publicaba un reportaje sacando a la luz las casi ochenta intervenciones policiales protagonizadas por este hombre, hoy, sus comportamientos han sido uno de los puntos principales de la reunión semanal de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de Zamora. Desde la Subdelegación del Gobierno aseguran que han recibido "escritos y alguna denuncia" sobre los comportamientos de este discapacitado y se tomarán cartas en el asunto. En concreto, Ángel Blanco indicaba que "entendemos que los recursos de la Policía por si solos no son suficientes para tratar este caso y nos hemos puesto en contacto con otras administraciones públicas para intentar solucionar este problema y satisfaga a todos".
Y es que, desde 2020, este hombre acumula intervenciones policiales altercados, agresiones, insultos, actitudes incívicas o desnudos en vía pública, además de seis denuncias, sin que se hayan tomado medidas judiciales que hayan atajado el problema. Como ya adelantaba este periódico, los Servicios Sociales han intentado proporcionarle ayuda, tanto para vivienda como atención médica, pero siempre las ha rechazado. Actualmente este hombre recibe una pensión y tiene asignado un cuidador, si bien, este se encuentra en Holanda, por lo que no está ejerciendo correctamente el amparo y control de este varón discapacitado.
Entre sus agresiones más conocidas destaca el ataque a una mujer en el barrio de La Horta, a la cual agarró del pelo para hacerla caer al suelo, para seguidamente lanzarse a su espalda y propinarle multitud de golpes por el cuerpo. También le consta una denuncia en el mismo barrio cuando se lanzó con su silla de ruedas a los tobillos de un vecino, al que atropelló en repetidas ocasiones hasta hacerle caer al suelo, tras haberle recriminado que no portaba la mascarilla obligatoria.