Comiendo unas hamburguesas en el aparcamiento del Centro Comercial Valderaduey. Así fueron sorprendidos los dos atracadores portugueses, que fueron detenidos el pasado domingo en Zamora, por varios delitos en Portugal y diferentes provincias españolas. La llamada de un ciudadano anónimo fue fundamental para atrapar a esta pareja, por cometer cuatro atracos en estaciones de servicio en Toledo, Badajoz y Sevilla.
Según ha relatado este mediodía el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, los presuntos atracadores llegaron a Zamora en un vehículo robado "a punta de pistola" en Madrid, días atrás. Una vez allí, accedieron a una conocida cadena de comida rápida, donde un ciudadano los reconoció y llamó a la Guardia Civil, quien alertó a la Policía Nacional y Municipal.
Las Fuerzas de Seguridad iniciaron así un dispositivo para atraparlos, mientras comían una hamburguesa en el propio vehículo. El comisario de la Policía Nacional de Zamora, Guillermo Vara ha indicado que "al verse rodeados no opusieron ninguna resistencia". La pareja se vio sorprendida por el suceso "y no les dio tiempo a reaccionar", añadía.
"Importante éxito policial"
Ángel Blanco ha calificado esta operación como un "importante éxito policial", y ha destacado que ha sido "imprescindible la colaboración ciudadana y la perfecta de todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado".
La pareja tenía una orden europea de detención y entrega dictada por Portugal por robos con intimidación cometidos allí, pertenencia a banda organizada y falsificación de documentos, de manera que el órgano jurisdiccional competente en este caso es la Audiencia Nacional. De hecho, los detenidos ya están en Madrid, según precisó el subdelegado.
Además, como cometieron varios hechos delictivos en España por lo que, una vez termine el proceso dirigido por la Audiencia Nacional en relación con la orden europea, contactará con el Juzgado de Guardia de Zamora para resolver la puesta a disposición o el ingreso en prisión.
Modus operandi
Sidney Alberto y Nélida Cristina son nacidos en Portugal y sospechosos de un triple crimen a finales de julio en Braganza, además de robar en cuatro áreas de servicio en las provincias de Badajoz, Toledo y Sevilla.
El último de ellos, en Cazalegas, muy cerca de Talavera de la Reina, en el kilómetro 103 de la A-5 sentido Extremadura. En las grabaciones del atraco se ve a Nélida Cristina, con un cuchillo y Alberto con una pistola con la que apunta al trabajador de detrás de la caja.
Él oculta su rostro y ambos van en chanclas. Ella con mallas negras y camiseta y él con bermudas negras y una camiseta gris. Encierran a los empleados y se van con el botín. Viajaban en un Citroën Xsara, pero en su huida se estrellaron a la altura de Carranque (Toledo).