"Siempre he admitido y aceptado las críticas, pero no puedo admitir de ninguna de las maneras es que se diga que el subdelegado del Gobierno en Zamora trata a los agricultores como si fueran delincuentes. Ni a los de Morales de Toro, que es mi pueblo, ni al resto de agricultores. Es una frase rotundamente falsa". Así de contundente se ha mostrado Ángel Blanco ante el comunicado enviado ayer por la Alianza UPA-COAG, donde acusaba precisamente al subdelegado de "perseguir como a delincuentes" a los viticultores que producen la vid para la Denominación de Origen Toro, y especialmente los de Morales de Toro.
Las asociaciones agrarias aseguraban que estos estaban sufriendo "una catarata de inspecciones" tanto laborales como administrativas en los tractores que por el número y por la intensidad consideran "desproporcionada". Pero Ángel Blanco ha negado este supuesto acoso y ha detallado cómo se han desarrollado los últimos controles en esta materia.
El subdelegado del Gobierno en Zamora ha detallado que Europol organiza jornadas conjuntas con las Fuerzas de Seguridad del Estado y la Inspección de Trabajo en la lucha contra la explotación laboral "en todos los estados miembros de la Unión Europea". Las fechas son las elegidas a nivel europeo y en Zamora este año se han realizado dos jornadas. Una del 15 al 21 de junio, "siendo los sectores prioritarios la manicura, doméstico, reparto de comida a domicilio, restaurantes chinos y control de la situación de los refugiados ucranianos en España". El resultado de estas acciones desvelaron la situación irregular de unos 25 trabajadores en la provincia, según detallaba Ángel Blanco.
La segunda jornada se celebró del 14 al 21 de septiembre y las actuaciones se han centrado en el sector agrario, en particular se han inspeccionado explotaciones agrícola-ganaderas en distintos municipios de la provincia, e inspecciones a la campaña de la vendimia, que se han desarrollado el 20 y 21 de este mismo mes, por cuatro funcionarios de la Inspección y cuatro agentes de la Guardia Civil. El resto de días de esta segunda campaña las inspecciones han sido realizadas por funcionarios de Trabajo y agentes de Policía Nacional.
Ángel Blanco ha recordado que estas actuaciones conjuntas tienen como objetivo la detección de posibles casos de trata de seres humanos, así como delitos de explotación laboral. El subdelegado del Gobierno en Zamora asegura que estas inspecciones se han realizado "con el máximo respeto a los sujetos inspeccionados, con absoluta discrecionalidad y profesionalidad; y en aras de velar siempre por los derechos de las personas".
Finalizaba su explicación recordando que "fruto de este trabajo conjunto" de la Guardia Civil y la Inspección es la operación que permitió destapar en 2020 una red de trata de seres humanos con fines de explotación laboral, liberando a 20 personas, y por la que se detuvo a seis integrantes de la organización.
Pese a todo, el subdelegado del Gobierno en Zamora se comprometió a reunirse con el alcalde de Morales de Toro, los posibles viticultores descontentos con las inspecciones y la propia Inspección de Trabajo para analizar la campaña tras la vendimia.