La Diputación de Zamora contrata a 37 peones para la limpieza y prevención forestal en la provincia durante los próximos seis meses. Será a través del Plan de Empleo Forestal, subvencionado por la Junta de Castilla y León, con una aportación de 370.000 euros, que se suman a 241.000 euros de la Diputación.
Medio centenar de desempleados, once de ellos mujeres, que pasarán a formar parte de las nueve cuadrillas de limpieza forestal de la provincia en las localidades de Alcañices, Bermillo de Sayago, Camarzana de Tera, Faramontanos de Tábara, Manzanal de Arriba, Mombuey, Peleagonzalo, Puebla de Sanabria y Trabazos.
Sus tareas consistirán en la realización de obras y servicios ligados a programas específicos de trabajos de prevención de incendios en la interfaz urbano-forestal y otros trabajos forestales y de mejora medioambiental.
Dichos trabajos, que se ejecutan a petición de los ayuntamientos, se refieren concretamente a prevención de incendios en la interfaz urbano-forestal, (mediante la eliminación del matorral, poda del arbolado y trituración o extracción de restos); apertura de fajas auxiliares contra incendios en carreteras y caminos rurales; tratamientos selvícolas de masas arboladas en parcelas de montes públicos próximas a los pueblos; adecuación de áreas recreativas y riberas; apertura y mantenimiento de sendas y trabajos diversos de colocación de señales, reposición de mojones, limpieza de pasos de agua y despeje de cunetas, plantaciones o reposiciones de marras.
Algo que este año cobra especial importancia, tras los terribles incendios forestales acaecidos en la provincia de Zamora este verano. Así lo han destacado tanto el presidente de la Diputación Provincial, Francisco Requejo; como la delegada territorial de la Junta en Zamora, Clara San Damián.
Requejo destacaba que, para la Diputación "resulta esencial la puesta en marcha de este plan, porque la prevención de incendios es nuestra prioridad en la lucha contra los incendios". El presidente ha insistido en que la lucha contra los fuegos "comienza en los meses de otoño, por esa razón es importante trabajar de forma coordinada en la prevención; y este plan es perfecto ejemplo de ello".
Por su parte, Clara San Damián recalcaba que "hoy más que nunca esta subvención es importante", para coordinar las actuaciones en la lucha contra los incendios. Y quiso poner de manifiesto "la colaboración en el trabajo entre instituciones por la prevención contra incendios, no solo por el dinero, sino por la tarea conjunta y de coordinación entre nosotros".
De hecho, la delegada territorial apuntaba que estas subvenciones se otorgan en función de la masa forestal calcinada en cada territorio. Y dado el desastre de hectáreas quemadas en la provincia de Zamora tras los incendios en la Sierra de la Culebra, esta cuantía de casi 400.000 euros en 2022 aumentará "notablemente" en el próximo año.
¿Cómo funciona?
Clara San Damián ha manifestado que “este Plan responde a las actuaciones de las consejerías de Empleo y de Fomento y Medio Ambiente con las nueve diputaciones provinciales, por tanto, con la de Zamora, en un ejemplo de coordinación administrativa, con el objetivo de desarrollar económicamente el territorio, dinamizar el sector forestal y prevenir incendios forestales; y desde el punto de vista del empleo, mejorar los niveles de ocupación en cantidad y calidad y apoyar a colectivos prioritarios: jóvenes, mayores de 45 años y parados de larga duración”.
La Consejería de Empleo financia con 10.000 euros cada contrato de seis meses a tiempo completo, un 65 % del Plan, tramita las subvenciones y supervisa las contrataciones, mientras que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente se responsabiliza de coordinar las actuaciones, apoyar la programación sobre el territorio y aportar formación en trabajos forestales y evaluar el programa.
Por su parte, las diputaciones aportan el 35 % de los fondos restantes del Plan, seleccionan y contratan a los trabajadores, aportan equipos, herramientas, materiales y vehículos, coordinan a los ayuntamientos, programan actuaciones, dirigen los trabajos y realizan el seguimiento y la evaluación de los mismos.
Los beneficiarios son desempleados inscritos como demandantes de empleo en las oficinas del Servicio Público de Empleo de Castilla y León (ECYL). Los contratos son temporales, con una duración mínima de 180 días a jornada completa.