La Asociación Cultural de Campaneros de Zamora ha acudido hoy al Museo Lázaro Galdiano de Madrid para asistir a la presentación de la candidatura del toque manual de campanas como Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Unesco.

Los campaneros zamoranos habían sido invitados por su esfuerzo, desde hace años, velando porque esta tradición tan arraigada en los pueblos perviviera en ellos en las generaciones venideras. Esta asociación recorre la provincia de Zamora y otros muchos territorios mostrando a los más jóvenes el noble arte del repique de campanas, a través de su escuela de campaneros y sus múltiples demostraciones en vivo. 

Y es que el repique de campanas ha sido durante siglos un medio de expresión entre las zonas rurales, con sus significados e importancia social. Han servido y sirven aún para informar de diferentes acontecimientos, como un fallecimiento, o de alerta, como en caso de incendios. Un método rudimentario, pero muy útil en las sociedades rurales, que ahora pretende entrar en el amparo de la Unesco.