Un apoyo de 1.275 colmenas para que los apicultores de la Sierra de la Culebra puedan volver a empezar

La Fundación Caja Rural de Zamora ha entregado 1.275 colmenas a la asociación Apis Durii con el fin de ayudar a los profesionales de la miel que se han visto afectados por los incendios de la Sierra de la Culebra del pasado verano. Y es que lo apicultores han sido uno de los sectores más afectados, con 8.000 colmenas y 120 apicultores que han perdido sus colmenas. 

El director general de Caja Rural de Zamora, Cipriano García, ha destacado la importancia de ayudar a las personas que han tenido dificultades debido a los incendios y ha asegurado que "es un honor" poder contribuir en momentos complejos de la provincia. Caja Rural de Zamora ha querido contribuir de este modo con los afectados en el ámbito de la miel y ayudarles en la consecución de sus negocios en el futuro tras el desastre.

Por su parte, el secretario técnico de Apis Durii, Francisco Alonso ha detallado que a esta aportación de la Caja se suman también la Asociación Zamora Solidaria, que ha aportado una cantidad de 7.265 euros y Cobadú y La Culebra No Se Calla, quienes han aportado 5.000 euros cada una. 

Francisco Alonso ha explicado también que una comisión de trabajo se ha encargado de escoger el producto concreto y se ha preguntado a los apicultores cuáles de las colmenas preferían para reponerles. Además, ha informado de que el tercer camión que completa el pedido de 1.404 colmenas ha llegado este lunes a la nave de Apis Durii, donde se repartirán las colmenas a partir de mañana a las 7 de la mañana en Mombuey.

Así, 51 apicultores que ha perdido alguna colmena a causa de los incendios, se les va a reponer al menos una colmena a cada uno, mientras que el apicultor que más colmenas ha perdido recibirá alrededor de 200. Los daños son variados, y se han visto afectadas 24 localidades en las que se han calcinado colmenas. Por ejemplo, Ferreruela de Tábara ha pedido unas 300 y Villardeciervos unas 200.

Futuro

Francisco Alonso también ha hablado sobre las expectativas del sector apícola después del desastre en la Sierra de la Culebra. El secretario técnico de Apis Durii estima que no habrá producción de miel durante aproximadamente tres años, pero algunos apicultores han podido reubicar las colmenas que salvaron. Aunque muchas colmenas han sufrido estrés y se han perdido, unas 6.600 colmenas se han librado del fuego.

Estas se han reubicado los municipios colindantes con la zona quemada para que los apicultores puedan tener colmenas cerca de sus hogares y gasten menos en combustible. Y también recordó que la Junta de Castilla y León ha proporcionado una ayuda de 125 euros para la compra de madera viva y otros agricultores podrían destinar ese dinero para la compra de enjambres.

Francisco Alonso ha explicado que producción de miel se ve afectada por las condiciones climáticas y se espera que la nieve en Sanabria sea beneficiosa para toda la provincia. A medida que llega la primavera, los apicultores esperan que las flores comiencen a aparecer y se levante el ánimo.

En cuanto a las marcas y la situación de envasado actual en nuestro país, el secretario técnico de Apis Durii ha señalado que se desconoce cuándo saldrá la nueva normativa del etiquetado. Con ella espera que se ayude a los consumidores a valorar más la miel producida localmente y a reducir las adquisiciones de miel de interior, que en su mayoría proviene del mercado asiático y se mezcla con miel española para su comercialización.

Finalmente, se ha mostrado poco positivo sobre la llegada de nuevos profesionales al sector debido a la falta de compras por parte de la industria y la manera en que "se han forzado los precios".