El sindicato de enfermería Satse ha alertado a la ciudadanía de Benavente y comarca sobre la preocupante falta de enfermeras que está afectando a la asistencia sanitaria en la Residencia pública 'Los Valles', dependiente de la Gerencia de Servicios Sociales.

Según Satse, esta situación ha llevado a que las enfermeras se vean obligadas con frecuencia a trabajar en sus días de descanso o permisos, "ya que no hay suficiente personal" para cubrir las necesidades asistenciales de la residencia, "y todo esto sin recibir compensación económica ni horaria".

"La solución no pasa por dejar sin descanso a las enfermeras ni por cancelar sus vacaciones, sino por una adecuada planificación que incluya medidas extraordinarias para atraer a enfermeras a esta Residencia", apuntan en un comunicado. Satse enfatiza que es necesario mejorar las condiciones laborales y económicas de estas enfermeras, equiparándolas a las de sus compañeras del Servicio de Salud de Castilla y León, así como ofrecer contratos de mayor duración y mejor remunerados.

El sindicato reconoce los esfuerzos de los responsables de la residencia por encontrar enfermeras para el verano, pero señala que el rígido sistema de contratación existente ha dificultado su búsqueda, dejando a las enfermeras en una situación comprometida a partir del 1 de junio.

Satse quiere recordar que la Gerencia de Servicios Sociales de Castilla y León ha ignorado "durante una década" las reivindicaciones de los profesionales sanitarios, que van más allá de mejoras laborales y afectan directamente a la calidad de la atención brindada a los residentes en los centros donde trabajan estos empleados públicos. Según Satse, "es crucial que la sociedad comprenda este punto."

El sindicato también critica que la Gerencia de Servicios Sociales esté implementando un nuevo modelo asistencial en las residencias, llamado 'Atención integral centrada en la Persona', sin tener en cuenta el déficit de profesionales ni consultar a los implicados. Además, destaca que estas enfermeras han soportado "condiciones laborales penosas durante los últimos diez años debido a la falta de consideración" por parte de la Administración, a pesar de que Castilla y León tiene una alta proporción de población envejecida.

Satse advierte que estas precarias condiciones laborales y la urgente necesidad de más enfermeras en la comunidad están provocando la fuga de profesionales de Enfermería hacia Sacyl y otras comunidades autónomas.

El sindicato hace hincapié en que el deterioro de las condiciones laborales y profesionales de estas enfermeras es una muestra de "la tendencia del Gobierno regional de negar mejoras" en el sistema público de salud, mientras aumentan los conciertos con residencias y centros privados, financiados con fondos públicos. Satse señala que esta situación "se repite continuamente en el tiempo" y se suma a la negación de permisos o licencias, así como a las malas condiciones de trabajo, lo que provoca una sobrecarga física y emocional en los profesionales.

El sindicato denuncia que las bajas laborales, los permisos y los días de asuntos propios no son cubiertos, lo que reduce los días de descanso semanal sin compensación. Esta situación afecta negativamente a la conciliación entre la vida laboral y familiar de las enfermeras, apuntan.

Satse también critica "la inefectividad y obsolescencia" de la bolsa de empleo actual, que lleva más de un mes sin candidatos. "La Gerencia de Servicios Sociales no ha tomado medidas urgentes para abrir un nuevo proceso de contratación y refrescar la bolsa de empleo con nuevos profesionales que puedan satisfacer la demanda", apuntan. El sindicato sostiene que el sistema de baremación de la bolsa de empleo no tiene en cuenta el tiempo trabajado en SACYL, lo que desincentiva a las enfermeras a optar por trabajar en la Gerencia de Servicios Sociales.

Además, Satse destaca que la Junta de Castilla y León no considera la ponderación horaria por turno de noche para estas enfermeras, a diferencia de sus compañeras en Sacyl. Esto contradice las recomendaciones del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo, que no diferencia el vínculo jurídico de los trabajadores a la hora de implementar medidas para reducir el impacto del trabajo nocturno en su salud.

El sindicato advierte que esta situación tendrá "un precio no solo para los profesionales, sino también para los ciudadanos". Si no se soluciona la escasez de enfermeras en la residencia de Benavente, los servicios sociosanitarios no podrán mantenerse ni afrontar los desafíos actuales y futuros.