Carlos Peña supera 10 horas nadando en el Lago de Sanabria con olas de medio metro de altura

El pasado sábado, a las 20.00 horas, el nadador extremo Carlos Peña concluyó con éxito el ambicioso desafío que se había propuesto: nadar de manera ininterrumpida durante 10 horas en una travesía solidaria en apoyo a la preservación del Lago de Sanabria en Zamora.

Con evidentes signos de fatiga pero lleno de gratitud, Carlos Peña expresó su agradecimiento a vecinos y visitates que se congregaron para brindarle su apoyo y celebró haber alcanzado su objetivo.

Su travesía no estuvo exenta de desafíos. Alrededor de las 13.00 horas, el clima de la zona experimentó un cambio drástico, con la aparición de un viento considerablemente fuerte yun intenso oleaje de hasta medio metro de altura. Este repentino cambio climático obligó a Carlos Peña a redoblar sus esfuerzos para cumplir con el propósito de la jornada.

El nadador estuvo acompañado durante esta aventura por un equipo que compartió su pasión por la causa. Piragüistas de Cryosanabria, un miembro del Club de Natación León y un miembro del equipo de investigación de la empresa Europarques, a bordo del barco 'Helios Coustou', se unieron al nadado en su travesía. 

La historia de Carlos Peña es una de perseverancia y pasión por el deporte y la conservación del medio ambiente. En su juventud, Carlos Peña se destacó como atleta de larga distancia, participando en varias maratones y ganando la Behobia-San Sebastián en la categoría juvenil.

Sin embargo, una lesión grave lo llevó a cambiar su enfoque deportivo, y desde 1989 ha estado dedicado a la natación de estilo espalda y a la natación extrema. Más allá de sus logros deportivos, Peña se describe a sí mismo como un defensor apasionado del medio ambiente y de las causas humanitarias.

El compromiso de Peña con la preservación del entorno también se ha reflejado en su historial de nadar en varios cuerpos de agua emblemáticos, como el Lago Titicaca, el Lago de Maracaibo, la Laguna de Mar Chiquita, el Mar Menor y el Mar Muerto, todos en defensa de la protección ambiental. En esta ocasión, nadó un total de 23 kilómetros en el Lago de Sanabria durante un impresionante lapso de 10 horas, demostrando su dedicación y resistencia.

La travesía solidaria y extrema de Carlos Peña no solo ha sido un triunfo personal, sino también un llamamiento de atención a la importancia de la conservación ambiental y la solidaridad humana. Su dedicación y pasión continúan inspirando a otros a unirse en la defensa de causas nobles y la búsqueda de un mundo más sostenible.