La Junta de Castilla y León insistió hoy en que “no se ha disparado a Carlitos”, nombre con el que se conoce popularmente al ciervo “apadrinado” por los habitantes de Linarejos (Zamora) y de cuya presunta caza se dio cuenta profusamente por las redes sociales y diversos medios de comunicación.
“Nuestra opinión es la que nos han trasladado nuestros agentes medioambientales que, en las reservas regionales de caza, acompañan a todos los cazadores y deciden sobre qué ejemplares hay que disparar o qué ejemplares se abaten en función del permiso del que se disponga. Ellos nos dicen que no se disparado a Carlitos”, afirmó el director general de Patrimonio Natural y Política Forestal, José Ángel Arranz.
“En cualquier caso, no es ninguno de los animales de las fotografías que circulan. Esa es la información que nos trasladan. Son nuestros agentes de la autoridad y, evidentemente, tenemos que creerlos y les creemos. Es la palabra de un funcionario público”, añadió.
En este contexto, el director general advirtió de que “es un peligro acercarse en época de celo a cualquier ejemplar de ciervo que ya ha llegado a la madurez” y apostilló: “Cuando uno se confía porque ha visto al ciervo pequeñito, cuando el ejemplar tiene ya una cornamenta que es capaz de herir y está en una época de celo, en la que su comportamiento es muy diferente, puede causar daño. Nuestra recomendación, como administración pública tiene que ser que la gente no se acerque a estos ejemplares, porque podemos tener un accidente”.
De esta forma, invitó a hacer una búsqueda a través de internet de accidentes con ciervos y reiteró que “no ha habido ni uno ni dos, ya que son más frecuentes de lo que parece”.
José Ángel Arranz hizo estas declaraciones en la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, donde participó en la presentación del XII Symposium Internacional 'Nuevos retos para la gestión y conservación de las poblaciones de oso y lobo'.