La tarde de este primer sábado de otoño fue para Zamora, donde su Mascarada, la tradición ancestral del antruejo y la máscara, el disfraz, la chirigota, el humor, la transgresión y los demonios que acechan, se dieron cita en la plaza de la Marina para recorrer la columna vertebral de la ciudad de Doña Urraca hasta llegar a la plaza de Viriato.

Cientos, o quién sabe si miles, lo cierto que fue una multitud de espectadores, los que pudieron disfrutar de esta imploración a los espíritus, buenos o malos, dependientes de la conciencia de cada cual. Tú, que levantas las nubes y vuelas sobre las alas de los vientos. Tú, que respiras y pueblas los espacios sin fin. ¡Océano de infinitas perfecciones!

Máscaras, mascarados y disfraces, parodias y 'carnaval', toda una amplia exhibición de la máscara ibérica, aunque son todos los que están, pero no están todos los que son. Eso sí, el esfuerzo de la Diputación de Zamora, organizadora del tradicional evento, y de su diputado de Educación, Cultura, Turismo y Emigración, Víctor López de la Parte, allí al control del desfile, es encomiable, en cuanto que logra traer la corazón de la ciudad del Duero, la ancestralidad cultural del mundo rural.

Recuperación de nuevas máscaras

Uno de los atractivos de esta edición es la participación, por primera vez, de los 'Jurrumachos de Montanchez' y el 'Carnaval Hurdano-Las Hurdes' de Cáceres, así como los 'Mascarinha e Masacarâo' de Vilarinho dos Galegos de Mogadouro y los 'Caretos de Arcas' de Macedo de Cavaleiros.

Destacar, en particular los once grupos portugueses que llevan, allá donde van, la alegría y la diferenciación, como son los 'Caretos de Grijó de Parada' con su 'bota vinho'. Además, estuvieron presentes el 'Diablo, Morte e Censura de Braganza', y los 'Caretos de Santo Estevao' de Braganza, así como los 'Velho Chocalheiro de Vale de Porco' y el 'Chocalheiro de Bemposta' con sus gaiteiros locales.

Además de los grupos portugueses, seis grupos españoles (sin contar los zamoranos) participaron en el desfile, como fueron los 'Jurrus y Castrones de Alija del Infantado' de León, las 'Jarramplas de Piornal' de Cáceres, las 'Carantoñas de Aceuche' de Cáceres, los 'Jurrumachos de Montánchez' de Cáceres, y el 'Carnaval Hurdano-Las Hurdes' de Cáceres, así como los 'Mazcaraos de Rozaes de Villaviciosa' de Asturias.

Por su parte, de la provincia de Zamora, rica en máscaras, contó con 15 grupos, como fueron  el 'Zangarrón de Sanzoles', los 'Carnavales de Villanueva de Valrojo', el 'Atenazador de San Vicente de la Cabeza', el 'Zangarrón de Montamarta', el 'Pajarico y el Caballico de Villarino Tras la Sierra', el 'Carnaval del Toro de Morales de Valverde', la 'Obisparra de Pobladura de Aliste', y alguna otra, como 'La Vaca Bayona' de Almeida.

Además, es importante destacar la recuperación de dos mascaradas de la provincia de Zamora que participan por primera vez en el desfile: 'La Fiera Corrupia de Almendra del Pan' y los 'Carucheros de Sesnández'. Además, Víctor López de la Parte señalaba que tras esta recuperación es posible que también se vuelvan a celebrar dichas mascaradas en sus correspondientes municipios.

Según avanza el camino camino de la ciudad del Tormes, tierras olvidadizas ya en el tiempo de este tipo de cultural rural, el viajero avanzaba con sus espíritus. Oh, Espíritu de todos los Espíritus, eterna alma de las almas, soplo inmortal de vida, aliento creador, boca que aspira y respira la existencia de todos los seres en el fluir y refluir de tu eterna palabra, que es el divino océano del movimiento y de la verdad, y de los demonios que, ahora por Navidad, regresan a convivir en los humanos por esos pueblos de Dios.