El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, en compañía del concejal de Obras, Movilidad, Infraestructuras Urbanas y Participación Ciudadana, Pablo Novo, ha anunciado hoy actuaciones destinadas a mejorar la movilidad urbana en la ciudad. Estas mejoras se centrarán en la bajada de San Pablo y la calle Martínez Villergas, situadas cerca del Mercado de Abastos.
En lo que respecta a la bajada de San Pablo, el alcalde explicó que se llevará a cabo una transformación de la vía, que actualmente cuenta con aceras de apenas 60 centímetros, para convertirla en una plataforma única, es decir, de preferencia peatonal. Esta transformación permitirá un mayor rendimiento en el estacionamiento de vehículos en comparación con la configuración actual. Tanto esta intervención como la que se realizará en Martínez Villergas se buscará que se financiancie a través de fondos europeos.
Guarido explicaba que el Ayuntamiento aprovechará "futuras convocatorias en 2024 para este tipo de inversiones en movilidad", aunque destacó que los trabajos comenzarán antes para cumplir con los plazos requeridos por estas ayudas. De hecho, la intervención en la calle Martínez Villergas comenzará la próxima semana, siempre y cuando las condiciones meteorológicas lo permitan, según adelantó el concejal de Obras.
Pablo Novo presentó el proyecto de plataforma única diseñado para la bajada de San Pablo, que permitirá la conexión de esta vía con la glorieta que conduce a la Ciudad Deportiva, un itinerario utilizado diariamente por cientos de peatones y que ya ha experimentado cambios en el sentido de la circulación.
Este cambio en la circulación se dio a conocer en septiembre pasado y se ha implementado aprovechando el plan de asfaltado, que incluyó también la bajada de los Tres Árboles. Como resultado, la vía ahora cuenta con dos carriles desde su acceso por San Pablo: uno que gira a la derecha hacia la Ronda de Puerta Nueva y otro que gira a la izquierda y se convierte en una plataforma única.
Novo destacó varios motivos fundamentales para esta modificación circulatoria. En primer lugar, la eliminación de un punto estrecho con prioridad circulatoria bajo la avenida de Portugal y la reducción del tráfico en un área que antes podía representar un peligro para los peatones.
En segundo lugar, la creación de una plataforma única segura para los peatones y la implementación de nuevas plazas de estacionamiento gratuito cerca del centro de la ciudad, en línea con los criterios de las ciudades 15, que buscan limitar el acceso del tráfico a las zonas principales de servicios y facilitar el estacionamiento a unos 15 minutos a pie de las áreas comerciales y de servicios. Por último, el proyecto busca reducir el tráfico hacia la Zona de Bajas Emisiones.
En cuanto al proyecto de plataforma única, este incluirá una renovación integral del pavimento en el carril de bajada y la sustitución del asfalto por otros materiales de construcción. Esto dará como resultado dos espacios diferenciados por el tipo de pavimento: uno estrictamente peatonal con losa de hormigón y otro espacio compartido entre el tráfico rodado y los peatones, con preferencia para estos últimos y configurado en adoquines de hormigón debido a su mayor resistencia.
El adoquín de hormigón también contará con un color diferenciado para la zona de estacionamiento gratuito de vehículos. Se utilizará una rigola de hormigón prefabricada para delimitar la zona exclusiva para el tráfico peatonal y garantizar un drenaje adecuado.
La intervención también mantendrá los árboles existentes en la vía y agregará mobiliario urbano, como bancos de polietileno, que se integrarán con los colores del pavimento. Pablo Novo destacó que esta intervención es parte de los esfuerzos del Ayuntamiento de Zamora para mejorar la movilidad en la ciudad, siempre poniendo al peatón en el centro de las políticas públicas.
Finalmente, se anunció que la próxima semana, si las condiciones meteorológicas lo permiten, comenzarán las obras para convertir la calle Martínez Villergas en una plataforma única. Estas mejoras ampliarán significativamente el espacio exclusivo para peatones, pasando de aceras de 0,90 metros de ancho a más del doble. Además, se eliminará el asfalto para dar paso a losas y adoquines de hormigón.