Cazurra, un pequeño pueblo de Zamora llevaba 40 años sin celebrar sus fiestas patronales. Pero este mes, el municipio ha recobrado su esplendor con la reciente conmemoración de las fiestas patronales en honor de San Martín. El protagonista indiscutible de este renacimiento festivo fue la venerada 'capa', un atuendo tradicional que resuena con la rica historia del lugar.

Este año se ha marcado un hito histórico para Cazurra, gracias a las decididas gestiones de la joven alcaldesa, Ana Vasallo, y su dedicado equipo. La capa, cargada de simbolismo y tradición, volvió a deslumbrar las calles del pueblo, siendo vestida con orgullo por varios vecinos que esperaron cuatro décadas para poder lucirla en esta fecha tan señalada.

La historia de San Martín de Tours, quien compartió su capa con un hombre desfavorecido, ha servido como fundamento para esta tradición arraigada en el corazón de los habitantes de Cazurra. Durante la eucaristía y la procesión, los vecinos rememoraron este acto de generosidad llevando la capa, una práctica que había sido interrumpida durante las últimas cuatro décadas y que ahora ha sido rescatada con entusiasmo.

La alcaldesa, Ana Vasallo, luciendo la capa junto a autoridades

La unidad del pueblo se manifestó durante las festividades, donde residentes locales y forasteros se unieron para celebrar la ocasión de manera especial. La corporación municipal expresó su agradecimiento a aquellos visitantes que aceptaron la invitación y participaron en los diversos eventos programados. La hoguera frente a la iglesia se convirtió en el epicentro de la congregación, con jóvenes y mayores disfrutando de música y repiques de campanas.

Uno de los momentos más emblemáticos fue el baile y vermut, donde todo el pueblo, junto con sus invitados de diferentes puntos de la provincia, compartieron risas y camaradería en un ambiente festivo. La alcaldesa, Ana Vasallo compartió su emoción al ver a los vecinos felices, destacando que lograr este renacimiento festivo fue su mayor orgullo como gerente del municipio.

Fiesta en Cazurra por la noche

"Ver a los vecinos emocionados y felices es el orgullo más grande que puede llegar a sentir un alcalde; yo, hoy puedo decir que he hecho el sueño de todos los vecinos realidad, es con lo que me quedo", expresó la alcaldesa, quien ya está trabajando junto a sus compañeros de la corporación municipal para asegurar que las festividades de San Martín, recientemente recuperadas este noviembre, continúen siendo una tradición anual en los años venideros.