La calidad de la leche de Gaza (Ganaderos Zamoranos) es algo indiscutible. La empresa zamorana puede presumir de ofrecer leche con garantía de origen de ganaderos de la provincia y elaborar con ella una extensa cantidad de productos, muy bien acogidos por el público. De sus últimas innovaciones estaba la nata Gaza o la leche de oveja, que se elaboran con los más altos estándares de calidad en la fábrica ubicada en Coreses.
Pero lejos de acomodarse en su ya consolidada gama de productos, Gaza ha querido arriesgar, ser valiente y ofrecer algo más a sus vecinos y compradores de toda España. Así que si una de las señas de identidad de Zamora es Gaza y otra su queso, casi era obligatorio fusionar ambas cosas.
La empresa zamorana acaba de lanzar la nueva línea de Quesos Gaza. En declaraciones a EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León explican que se trata de "un emocionante e innovador camino" que inician por "nuestra vocación y legado ganaderos".
Así nacen estos seis quesos elaborados con leche zamorana de cercanía, de sus granjas ganaderas. Estos están elaborados por queseros artesanos; y producidos con tecnología europea de vanguardia con de leche de vaca y nata de oveja pasteurizados. Leche Gaza ha pensado especialmente en "esos consumidores cada vez más exigentes con su alimentación, dispuestos a valorar la trazabilidad, la cercanía y la experiencia".
Y como resultado, la empresa ha creado una colección "refinada" con una "sobresaliente" relación calidad/precio y que desea llegar al creciente público que busca nuevas opciones gourmet de origen nacional. "Una variedad de aromas y sabores, adaptada a un amplio abanico de gustos y presupuestos", indican desde la firma lechera.
Tributo a la mujer rural
Aparte de expandir su gama comercial con productos de la tierra, Leche Gaza ha querido hacerlo haciendo un homenaje precisamente a ese mundo rural del que provienen sus orígenes. Por ello, la marca ha dedicado sus seis nuevos quesos a las mujeres rurales para conectar "con la tierra, la tradición y la ganadería". Gaza ha querido hacer un homenaje a las mujeres del mundo rural, otorgando una personalidad de mujer a cada queso de la línea.
Se trata de un tributo "a aquellas que, desde el afecto, con sus incansables manos, tanto hicieron por nuestras tierras, pueblos y familias". Cada queso recibe una nomenclatura de mujer y su oficio, para conectar sus nombres a los de "nuestras abuelas, que nos evocan calidez, cuidado y tradición". Leche Gaza quiere hacer así una conexión directa con "esas raíces, lugares y oficios a los que hemos querido honrar a través de la mirada de estas mujeres artesanas e incansables".
Este camino nos conecta además con los valores de nuestra marca, de sobra conocida por su origen y tradición vinculada a la ganadería. Así rescatamos esa autenticidad, patente en los casi 60 años de historia de Gaza, como base para construir una novedosa línea gourmet.
Leonor, 'la zagala'
El primero recibe el nombre de Leonor, 'la zagala'. Se trata de su queso más joven, inspirado en "esas mozas que guiaban con cariño sus rebaños hacia los verdes pastos". Leche Gaza explica que el queso Leonor es la expresión "más pura y real" de la cuajada de oveja, convertida en una láctica suave, llena de matices.
La imagen que acompaña a este producto, la joven Leonor, es la personificación de esa labor de pastoreo, y además, la láctica más tierna de esta colección premium de Gaza.
Un queso con dos semanas de maduración, tan esponjoso que se deshace en la boca, con fragancias frescas y delicadas de leche. A su suave cremosidad, con notas dulces, se añade una ligera acidez, muy equilibrada, además de matices de hierba con toques minerales y de nueces.
Está elaborado con cuajo fresco, que aporta un toque herbal "que necesita toda buena tabla de quesos". La marca aconseja combinarlo con vinos jóvenes verdejo o tempranillo, frutos secos, crackers, y trozos frescos de pera o uva.
Luisa, 'la segadora'
El segundo queso corresponde a Luisa, 'la segadora'. Un homenaje a esas mujeres que empuñando su guadaña, marchaban por los campos para recoger las cosechas, juntar el forraje o quemar las malas hierbas. Con este queso, Leche Gaza honra a mujeres "tan tenaces como Luisa, que trabajaron sin desaliento para garantizar a los suyos o al ganado, el bocado y sustento".
El queso tiene cuatro semanas de maduración y se presenta con una corteza de apariencia rocosa, y sensaciones granulosas al deshacerse en boca. Un queso que despierta en nariz una mezcla de humo, cueva y vegetación.
Está trabajado la técnica del ahumado a partir de cortezas vegetales, una manera tradicional de alargar la vida de los alimentos usando elementos recogidos de la propia naturaleza. Su sabor se reparte "entre lo intenso y lo lácteo, entre lo dulce y lo salado". Un queso de "recorrido largo", en el que se adivinan gustos tostados y esencias a barbacoa.
Un queso de rica textura con sabores terrosos, y una experiencia compleja y satisfactoria para el paladar. El queso más versátil de Gaza, con la habilidad de alegrar el aperitivo o realzar cualquier plato. La marca recomienda emparejarlo con un Jerez palo cortado, dátiles, mermeladas o panes de miga densa.
Paula, 'la cardadora'
El tercero de los quesos de Gaza es para Paula, 'la cardadora'. Un queso azul de cuatro semanas de maduración que rinde tributo a la artesanía textil, "tantas veces realizadas por mujeres incluso en sus propias casas", apuntan. La marca quiere recordar esa labor en la que las cardadoras preparaban la lana, separando una y otra vez las fibras con su carda. Así hasta lograr un material suave, uniforme, listo para tejerse en prendas hermosas y reconfortantes.
Gaza hace un símil de ese entretejido creando un queso con gusto intenso y con un punto salino, que armoniza los aromas sedosos de la nata de oveja y la dulzura untosa de la leche de vaca. Este queso tiene una elaboración cuidadosa, como lo era el cardado de la lana.
Gaza recuerda que "ambos casos se necesitan habilidades artesanales y conocer a fondo el proceso y las materias". En el caso del queso cuajada, sal, penicillium… y tras madurar, el resultado de tanto empeño es este queso, de vistosa textura y gran recuerdo en el paladar. Así es como consigue una textura cremosa se complementa con delicadas vetas azules "que se deshacen al paladearlo".
La marca aconseja saborearlo con panes rústicos, o combinado con frutas, confituras o miel. Nunca decepciona si se toma con sidra, vinos dulces, moscatel o Jerez, o también si se le acompaña con higos o membrillo.
Rosario, 'la rabadana'
El cuarto está dedicado a las mujeres trashumantes, a pastoras expertas como Rosario, 'la rabadana', que vigilaban y conducían el ganado sin descanso. "Son un claro ejemplo de determinación e integridad en el cuidado de los rebaños. Nos ilusiona hacer este queso dedicado a estas rabadanas que, con entereza y valentía, cuidaban de sus cuadrillas por cañadas y caminos", indican desde Gaza.
Este queso de dos semanas de maduración, se presenta con una fina capa de moho blanca y aterciopelada que le va aportando diversos sabores, sutiles aromas, que evolucionan con el tiempo. "Un eco también de las etapas y experiencias en la vida de nuestras ganaderas de ayer y hoy", apuntan.
Esta gama tiene un marcado acento a hierba y champiñón silvestre; una corteza firme, de sutiles matices; y una sedosa cremosidad de su interior en boca. Su gusto es dulce y fresco "como el de la leche recién ordeñada" y predominan en él los aromas lácticos con toques sutiles de hongos, y matices terrosos propios del moho exterior.
Gaza recomienda catarlo con un maridaje de vinos jóvenes y blancos secos, como Sauvignon Blanc o Chardonnay joven; también con un Ribera del Duero tinto y afrutado. Por sus toques suaves, encajan a la perfección con uvas o manzanas frescas, panes suaves, y frutos secos. "Un queso llamado a convertirse en el inesperado ingrediente de sofisticadas ensaladas, o de apetecibles bocadillos", añaden desde la empresa zamorana.
Catalina, 'la guardesa'
Catalina, 'la guardesa', es el quinto queso de Gaza. La guardesa era la encargada de vigilar y mantener en orden propiedades, campos, huertos o ganado. Este queso honra esa incansable actitud de cuidado y protección, que también era el reflejo de su amor por conservar lo que más importa.
Esta pieza presenta una fina capa de ceniza vegetal, sugerente y con un interesante aroma ahumado. El queso tiene dos semanas de maduración y ofrece un gusto suave y fundente con un leve punto de nata ácida al paladar. La corteza está encenizada por lo que aporta aromas de tierra fresca y vegetal, además de una tenue complejidad que enriquece la experiencia cuando se cata.
Gaza recomienda disfrutar este queso en una cena familiar especial o en para una merienda campestre en compañía de amigos. Una última gama muy versátil, que armoniza bien con vinos blancos suaves o espumosos, así como con frutas frescas (como manzanas o uvas verdes). Y es igualmente el compañero ideal de panes artesanales o galletitas suaves.
Valentina, 'la arriera'
Cierra esta esta gama de quesos Valentina, 'la arriera'. Para ello, Gaza bebe la historia de las arrieras. Ese duro camino cuando transportaban mercancías y ganado por los polvorientos caminos y ásperos terrenos. La piel, curtida al sol, y la entereza de estas admirables mujeres, nos conecta a la textura de la corteza y la pasta de este queso.
En eso se inspira la empresa para crear un queso de tres semanas de maduración, con una corteza colorida, con tonos que van del naranja al rosado; y que en su interior presenta una pasta suave y cremosa, con algunos agujeros. Su aroma es "intenso pero equilibrado", que huele ligeramente vegetales y con un recuerdo a nuez. En boca dominan los sabores lácticos, ricos y cremosos, acompañados de notas terrosas y notas sutiles de frutos secos.
La marca zamorana aconseja este último queso para reuniones y aperitivos, con vinos tintos suaves como un Pinot Noir, o blancos ácidos como un Albariño o Verdejo. También animan a combinarlo con frutos secos como almendras o avellanas; o junto a una base de pan de pueblo o galletas suaves.
¿Dónde se compran?
Gaza quiere tratar con mucho cariño esta gama de quesos tan especial para ellos. Así que, de momento, estos productos solo se pueden adquirir en exclusiva en dos puntos de Castilla y León.
El primero de ellos es 'La Abacería de Productos', en la Plaza Mayor de Zamora capital, una conocida tienda de productos gourmet provenientes de la provincia. Y el segundo es la tienda delicatessen de Valladolid capital 'Mesetarios', ubicada en la céntrica plaza de El Salvador.
La idea de la empresa zamorana es extender "en cuanto sea posible" la distribución de sus nuevos quesos a toda la Comunidad, pero esta Navidad es su primera prueba de mercado.