El concejal de Turismo de Zamora, Christoph Strieder, ha estado presente este fin de semana en Valencia, donde ha promocionado internacionalmente a la ciudad como destino MICE (turismo de negocios), en un singular Taller de Familiarización con representantes de compañías italianas, organizado por Turespaña Roma y Spain Convention Bureau, es decir, la Federación Española de Municipios y Provincias y el Consistorio valenciano.

Durante el evento, el responsable municipal ha contactado con 14 empresas italianas que pertenecen a los sectores de la industria farmaceútica, electrónica, energética, automovilística, banca, cosmética o finanzas. 

Son agencias que representan o trabajan con compañías multinacionales que tienen sede en España, como en el caso de ENEL, relacionada con Endesa y con más de 30.000 trabajadores en nuestro país.

Según Strieder, España "les interesa por su patrimonio cultural, sus infraestructuras modernas, por la heterogeneidad de sus ciudades, que ofrecen una buena organización para eventos, y una oferta seria y también muy generosa en gastronomía", sin olvidar el "asunto económico". Y en ese punto es donde Zamora puede colocarse en un mercado emergente que exige precios competitivos y una buena conexión a través de la Alta Velocidad, ya que la sostenibilidad es otro de los criterios que más se barajan a la hora de elegir destino para las reuniones de negocios. "Últimamente, la pregunta en todos los encuentros pasa por conocer las actividades verdes que podemos ofrecer", resalta el edil de Turismo.

Y Zamora, con dos Planes de Sostenibilidad en Destino, el proyecto del Observatorio Ecológico Transfronterizo y el Proyecto de la candidatura del Paisaje Cultural de la UNESCO, tiene argumentos para posicionarse como destino emergente, aunque "necesitamos sellos concretos", en opinión de Strieder, que también reivindica la creatividad a la hora de poner en marcha "ofertas especiales" relacionadas con el vino, el queso, la naturaleza y la promoción de espacios especiales para reuniones. Todo ello sin olvidar, en este caso, la cultura mediterránea que une a los países del sur. "De esta manera, jugamos con la diferencia de un país diferente y la familiaridad de lo conocido, de una cultura que nos une", concluye el concejal de Turismo.