Sin embargo, el lunes 1 de julio la calle volverá a cerrarse para llevar a cabo perforaciones de anclajes necesarias para asegurar la estructura afectada. Estas perforaciones se realizarán en dos fases hasta el 12 de julio y generarán lodos (mezcla de agua y tierra), lo que requerirá el cierre total de la calle durante ese período.

Posteriormente, desde la siguiente semana hasta el viernes 19 de julio, se llevará a cabo el tesado de los anclajes y la finalización de las obras. Durante esta fase, se espera que Puerta Nueva pueda permanecer abierta al tráfico, siempre que las condiciones lo permitan.

El Ayuntamiento ha concluido la primera intervención, que consistió en reparar los muros de contención para restablecer la seguridad tanto para vehículos como para peatones. La siguiente fase de obras se centrará en la reparación estructural del viaducto, "garantizando así la estabilidad a largo plazo de la vía", según apuntan desde el Ayuntamiento de Zamora.