La Junta de Castilla y León acaba de declarar la alerta por incremento de riesgo meteorológico de incendios forestales durante los días 18, 19 y 20 de julio, debido al aviso de fenómenos adversos por la ola de calor prevista para estos tres días.

De hecho, y según la Aemet, se espera la entrada en Castilla y León de una masa de aire caliente en altura, que comenzará a retirarse a partir del día 20, lo que habitualmente implica un incremento de la inestabilidad atmosférica. Esta situación extrema provocará un aumento notable de temperaturas máximas y mínimas, y empeorará las condiciones de humedad del combustible vegetal. Además, habrá rachas de viento con velocidades superiores a los 40 kilómetros por hora el viernes y el sábado.

Los índices de peligro de incendios forestales manejados tanto por AEMET como por el Operativo de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Castilla y León INFOCAL, coinciden en que este episodio implicará un incremento significativo de la probabilidad de ignición y de la capacidad de propagación del incendio. Ante esta situación especial, la Consejería considera necesario regular las actividades que tienen mayor probabilidad de originar incendios en el medio natural y hacer un llamamiento especial a la ciudadanía para que extreme su precaución.

En este sentido, la resolución prohíbe encender fuego en el monte en todo tipo de espacios abiertos, así como en zonas recreativas y de acampada, incluso en las zonas habilitadas para ello; impide el uso de barbacoas situadas en espacios abiertos del monte o en la franja de 400 metros del terreno que los circunde, así como el uso de maquinaria que, en su funcionamiento habitual, despida chispas o descargas eléctricas, tales como sopletes, soldadores y radiales, tanto en el monte como en una franja de 400 metros del terreno que lo circunde. Por último, suspende las autorizaciones de uso del fuego y de fuegos artificiales, cohetes o artefactos de cualquier clase que contengan llama.

Uso de maquinaria agrícola

En cuanto a la utilización de maquinaria agrícola como cosechadoras o empacadoras, no se aplicará ninguna medida complementaria a las que ya establece la orden para toda la época de peligro alto (EPA), que comprende del 12 de junio al 12 de octubre. Se debe suspender la actividad cuando la temperatura sea superior a 30 grados y la velocidad del viento esté por encima de los 30 kilómetros por hora.

No obstante, se recomienda posponer las labores no urgentes y mantener la máxima precaución. En todo caso, la resolución considera necesario tener a mano los medios de extinción y el personal suficientes para controlar los posibles incendios que se puedan originar como consecuencia de la labor.

La Junta solicita a la población que extreme su prudencia y adopte medidas de precaución en sus actividades al aire libre. Cualquier mínima imprudencia puede dar lugar a una situación de riesgo de gran incendio forestal. Se recuerda que avise inmediatamente al 1-1-2 ante el avistamiento de posibles incendios forestales.