Los vecinos de Vega de Villalobos han empezado con los primeros pasos para rehabilitar la torre espadaña de la iglesia de San Román, la única que existe actualmente en la localidad. Se está llevando a cabo a través de una nueva comisión vecinal, y de la mano de la Fundación ZamorArte. 

Por eso, los habitantes contribuirán a costear parte de las obras con campañas de donaciones y actividades organizadas con el fin de reunir los fondos necesarios, en un camino que esperan, sea a medio plazo. Una nueva experiencia de financiación colectiva, que se asemeja a la realizada por los vecinos de Villalpando para salvar San Pedro. 

Todo ello, se ha acordado en una reunión informativa que tuvo lugar recientemente en el templo, y donde participaron diferentes colectivos de la localidad: la Asociación Cultural las Pandas, las cantoras del coro, el Club del Jubilado, el Club de Caza, miembros de las Peñas, así como las distintas Cofradías como las Candelas, el Cristo y San Isidro, junto con el Ayuntamiento, encabezado por la alcaldesa, Rebeca Navias.

El responsable del área de Cultura, Patrimonio y Sociedad de la diócesis de Zamora y director de la Fundación ZamorArte, Juan Carlos López, fue el encargado de explicar que vías hay que seguir para alcanzar el objetivo de rehabilitar la torre, que es la imagen más simbólica de esta localidad de Tierra de Campos, de apenas 89 habitantes censados.

El párroco de la iglesia, Abelardo Febrero, hizo hincapié en que se lleva trabajando en este proyecto desde hace tres años. Aunque el templo data de 1830, la torre espadaña es anterior, pero se desconoce su fecha de construcción y presenta un deterioro destacado.

En la reunión se expuso un video de 15 minutos donde animaba a los vecinos de Vega a formar parte de este proyecto de trabajo colectivo para recuperar la torre. Al final de dicha reproducción se podía apreciar el toque de campanas restauradas hace años, y donde los vegueses también aportaron su colaboración con el lema: 'salvemos nuestra torre'. 

Una proyección que recoge los testimonios de la vecina más mayor de la localidad, Domitila, de 93 años, así como la más joven, Sara, de 17 años. Ambas explican el significado que tiene para ellas la torre, sus campanas y la necesidad de rehabilitación.

También las declaraciones de Esperanza y Andrea, octogenarias que añoran esa estampa desde los lugares a donde emigraron. Con sucesivas imágenes antiguas y más modernas, en 1962, Abelardo Febrero llegó como párroco por primera vez a Vega cuando había 800 habitantes. En el video se lanza la cuestión de si los vegueses apuestan por luchar para salvar su imagen más icónica, que "llama a casa", y donde se han celebrado los momentos más felices, pero también los más tristes del municipio.

El presidente de ZamorArte animó a los vecinos a seguir el "ejemplo" de la localidad de Villalpando y su campaña, que también estuvo impulsada por la fundación. "Es un camino replicable", subrayó a los allí presentes, donde reconoció haber visto que "no es simplemente una torre: es un símbolo, un emblema".

En una memoria valorativa llevada a cabo en 2020 señalaba en unos 50.000 euros el importe estimado para las obras, algo que tendrá que ser actualizado y revisado, con el fin de devolver a la torre "la prestancia que tuvo" y que se pueda "legar a futuro". López adelantó la posibilidad de concurrir al convenio de bienes inmuebles que el Obispado tiene con la Diputación de Zamora para financiar el 50% de esta intervención, para lo que se necesita "convencer" a la Comisión de Obras de la Diócesis, que evaluará la posibilidad de incorporar la rehabilitación para 2026.

Juan Carlos López señaló que en Zamora hay más de 350 parroquias y todas tienen alguna necesidad. "Los recursos son los que son", afirmó. La parte restante que habría que pagar estaría a cargo de la propia parroquia y, por ello, se necesita la constitución de una comisión, algo que finalmente quedo conformado cuando finalizó la reunión.

Esta deberá comenzar a trabajar en un Plan de Acción por fases, donde se dé a conocer el proyecto "que la provincia sepa que existe un pueblo llamado Vega de Villalobos", la colecta popular, con el certificado de donación para bonificaciones fiscales, y además, una campaña de crowfunding para las plataformas creadas para dar visibilidad. "Esto no es de hoy para mañana, pero es ir empezando a caminar", se recalcó en la reunión, donde López señalo que todo el proceso debe ser "meridianamente transparente y público".