La Guardia Civil de Zamora intensificó la vigilancia de los montes de la provincia con el fin de controlar la actividad micológica y evitar el posible comercio ilegal de las setas por bandas organizadas.

Aunque el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil tiene entre sus misiones el control de la actividad micológica, en estas vigilancias han participado distintas unidades territoriales de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Zamora actuando en diversos puntos de la provincia.

Por parte de los agentes especializados se han hecho inspecciones en los puntos de compra-venta de setas y se han establecido servicios encaminados al control de la recolección en los montes, dando como resultado la instrucción de 73 Actas-Denuncia a Ley de Montes de Castilla y León. 

Entre las infracciones más comunes están las de recolectar setas en lugares acotados o reservados, exceder la cantidad de setas permitidas por persona y día en terrenos libres (3 kg por persona), recolectar setas sin respetar la talla mínima, no usar recipiente que permita la caída de las esporas o incluso utilizar utensilios prohibidos.

En una de las actuaciones se sorprendió, en un pinar de la Comarca de la Guareña, a varias personas portando una autorización micológica de otra provincia que amparaba la venta de setas recolectadas, siendo incautados un total de 140 kilogramos que serían comercializadas ilegalmente.

Por parte de distintos ayuntamientos de la provincia, solicitaron apoyo a la Guardia Civil, ante la sospecha de que sus terrenos regulados estuvieran siendo aprovechados por personal no autorizado o sin los permisos necesarios, incrementando la presencia policial y sorprendiendo a varias personas sin autorización municipal.

Junto a la Agencia Estatal de Hacienda Tributaria se llevaron a cabo inspecciones conjuntas de varias empresas de las comarcas de Aliste, Sanabria y Zamora, para el control de la compra autorizada y bajo la regulación tributaria pertinente de los proveedores de las empresas inspeccionadas.

Finalmente, señalan que durante las inspecciones se han detectado infracciones en materia de sanidad alimentaria que regula la actividad de compra-venta del recurso micológico formulando actas -denuncias a los Servicios Oficiales de la Junta de Castilla y León.