La Unión General de Trabajadores (UGT) denuncia que la pandemia del coronavirus está aumentando la brecha de género en las prestaciones por desempleo, así como las desigualdades entre hombres y mujeres en un mercado de trabajo con mayores tasas de paro femenino, interrupciones en sus carreras de cotización, más temporalidad, salarios inferiores, entre otras cuestiones.
En este sentido, el sindicato señala que los hombres perciben más prestaciones contributivas de desempleo que las mujeres, con cuantías más altas, mientras que son ellas las que perciben mayores prestaciones asistenciales.
Así lo recoge el informe 'Mujeres al frente, mujeres a la retaguardia. COVID-19, empleo y protección social', en el que el sindicato apunta que en el mes de marzo el 53% de las personas beneficiarias del conjunto de prestaciones por desempleo fueron mujeres, frente a un 47% de hombres.
Sin embargo, si se tiene en cuenta el tipo de prestación reconocida, las mujeres son el 49,17% de la prestación contributiva, mientras son mayoría en el nivel asistencial, como el subsidio desempleo (54,36%), llegando hasta más del 60% como beneficiarias del subsidio agrario o en la Renta Activa de Inserción.
De esta forma, en esta última modalidad, el 64,56% de perceptoras son mujeres y en el Programa de Activación para el Empleo, también más del 60% de las personas beneficiarias son ellas, de acuerdo al estudio de UGT.
BRECHA TAMBIÉN EN LA CUANTÍA DE LA PRESTACIÓN
En sindicato denuncia que, además de existir una brecha de género en la percepción de las prestaciones, también existe en la cuantía de las mismas. La brecha en la cuantía media bruta diaria de la prestación por desempleo alcanza el 18%, según recoge UGT.
En concreto, apunta que los hombres cobran 30,71 euros de cuantía bruta media diaria mientras las mujeres cobran 26,11 euros. Por tanto, las mujeres cobran 4,6 euros menos al día que los hombres, que se traduce en una brecha de género que alcanza el 17,98%.
Esta diferencia es el resultado de la brecha salarial que sufren las mujeres cuando están trabajando, sus salarios son menores y, por tanto, sus beses de cotización son menores y se traducen en cuantías inferiores en la prestación contributiva por desempleo.
Para UGT, estos datos ponen de manifiesto que las mujeres son mayoría de las beneficiarias de las prestaciones de carácter asistencial, debido a las dificultades para acceder y mantenerse en el empleo y su dificultad para generar derecho a la prestación contributiva, en la que es necesario como mínimo, tener un periodo mínimo de cotización de trescientos sesenta días dentro de los seis años anteriores a la situación legal de desempleo.
ELLAS, MÁS AFECTADAS Y EXPUESTAS AL COVID-19
De esta forma, el sindicato denuncia que el COVID-19 ha agravado las desigualdades laborales de género. En esta crisis, las mujeres han sido las más afectadas, ya que son un 56,16% del total de personas que la han sufrido de manera más directa, tal y como expone.
Según UGT, esto es debido a que ellas han estado más expuestas tanto por la concentración del desempeño de trabajos de primera línea durante la crisis sanitaria, como por la asunción de cuidados en la familia que ha venido siendo tradicional en los hogares.
De esta forma, las mujeres son mayoría entre los que han sido llamados trabajos de primera línea, con 1.310.000 mujeres ocupadas en estos sectores de actividad, por 401.700 hombres. En concreto, las trabajadoras de las actividades sanitarias y de servicios sociales son mayoría, su trabajo está infravalorado y soportan una brecha salarial del 29,33 % frente a sus compañeros, tal y como afirma el sindicato.
A excepción de las mujeres ocupadas en las actividades financieras, todas las mujeres que están trabajando en la primera línea de la crisis sanitaria, y en los denominados trabajos esenciales, perciben salarios inferiores a los hombres, según sostiene UGT.
POLÍTICA CENTRADAS EN LAS MUJERES
Por todo ello, UGT reclama la necesidad de estimular políticas centradas en favorecer el empleo de la mujer y acabar con las desigualdades de género en el plano social y laboral.
"La crisis del coronavirus ha puesto de manifiesto la desprotección de las mujeres en el mercado de trabajo, cuando han sido precisamente ellas, de forma mayoritaria, las que han sostenido a este país en los sectores de primera necesidad y en los cuidados de los familiares", destaca al respecto.
En este sentido, el sindicato considera "imprescindible" que las mujeres "sean el centro de los planes de recuperación y evitar que los limitados logros en materia de igualdad alcanzados durante esta última década, no retrocedan por culpa de la pandemia".