El presidente de Castilla y León, el 'popular' Alfonso Fernández Mañueco, se ha felicitado tras el anuncio hecho público este viernes por Renault de que su nuevo plan de ahorro de costes no contempla el cierre de factorías en la Comunidad, si bien ha aprovechado para urgir al Gobierno de Pedro Sánchez la urgente puesta en marcha de la Mesa de la Automoción para "preservar el tejido industrial" del sector.

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La reacción de alivio del máximo responsable del Ejecutivo autonómico, en declaraciones recogidas por Europa Press, se producía después de que los máximos responsables de la multinacional del rombo garantizaran que su plan de ahorro de costes, fruto de la crisis generada por el coronavirus, no contemplara la reducción de su producción en sus fábricas españolas (Valladolid, Palencia y Sevilla) y tampoco el cierre de sus factorías ubicas en territorio nacional.

En parte, Fernández Mañueco entiende que la decisión de no tocar las factorías en Castilla y León obedece a que esta tierra "lleva mucho tiempo haciendo los deberes", fruto del cual goza de un "sector competitivo como consecuencia también de una apuesta por el diálogo, el consenso y un trabajo colectivo bien hecho".

En cualquier caso, y al objeto de conservar y proteger el tejido industrial del sector, el mandatario castellanoleonés se ha dirigido al Gobierno central a fin de que éste, "ya que es más urgente que nunca", ponga en marcha una Mesa de la Automoción que trabaje de inmediato en la adopción de las medidas pertinentes.

Y es que, como así ha subrayado, "la automoción es uno de los grandes sectores económicos de Castilla y León y desde la Junta se seguirá apostando y trabajando por su futuro", de ahí que, como así ha puntualizado, el Ejecutivo regional "seguirá muy pendiente de la evolución del sector y estará en contacto permanente con la dirección de Renault".