Los procuradores socialistas por la provincia de Valladolid han mostrado este miércoles su rechazo respecto de la forma y el modo empleados por la Junta con el municipio, al que han impuesto volver a la Fase 1 ante los brotes de coronavirus registrados.
Los parlamentarios vallisoletanos del PSOE, Luis Fernández Bayón, Patricia Gómez Urbán, José Francisco Martín Martínez, Laura Pelegrina Cortijo, Pedro González Reglero e Isabel Gonzalo Ramírez, aseguran que, tras el Consejo de Gobierno extraordinario del martes, los consejeros Francisco Igea y Verónica Casado decidieron "de manera unilateral, y sin contar con el alcalde de Valladolid, aplicar medidas más restrictivas".
Así, a partir de la próxima medianoche se reduce el número de personas en velatorios y lugares de culto a un máximo de diez. La hostelería verá reducido el número de personas que pueden estar en una mesa y disminuyen los aforos de los comedores y bares; en la cultura se limita a 25 personas en espectáculos en espacios cerrados y 50 al aire libre.
Ambos son los sectores más afectados económicamente por estas medidas. "Lamentamos profundamente que ninguna persona de la Junta de Castilla y León se haya puesto en contacto con los responsables del Ayuntamiento de Valladolid para informar y justificar las medidas aprobadas en el pasado Consejo de Gobierno que entrarán en vigor este jueves y que afectan a derechos fundamentales de muchos vallisoletanos y vallisoletanas", apuntan.
"La falta de diálogo de la Junta de Castilla y León con el Consistorio vallisoletano hace que peligre la celebración de actividades culturales que iban a tener lugar próximamente y que cumplían ampliamente con la seguridad y el distanciamiento", lamentan a través de un comunicado recogido por Europa Press.
Y es que, todos ellos coinciden en que estas nuevas medidas "han dado la puntilla a un sector, el cultural, al que la crisis del Covid-19 ha hecho un daño irreparable y, además, ha sido el gran olvidado por la Consejería de Cultura, teniendo que ser los ayuntamientos los que suplan, en gran parte, la desidia de la Junta con este sector".
Los socialistas extienden igualmente su preocupación por la repercusión que tendrán estas medidas en un sector tan importante para Valladolid como es el sector de la hostelería, ya que el no haberlas consensuado con el Ayuntamiento y proceder de la manera en que lo ha hecho la Junta, hará que muchos establecimientos, que ya habían realizado pedidos para un fin de semana en el que había muchas celebraciones, no puedan devolver los mismos.
Esto, añaden, causa un gran perjuicio a un sector duramente castigado por la crisis, al tiempo que recuerdan que muchos empresarios han hecho un gran desembolso económico para adaptar sus negocios con el fin de crear espacios seguros para los usuarios.
Y concluyen: "Los procurarodes socialistas vallisoletanos creemos que se han de tomar medidas que aseguren la salud de los ciudadanos castellano y leoneses, pero también consideramos que esta es una lucha que tienen que hacer todas las administraciones de una manera conjunta, y aunando esfuerzos, no como han hecho Igea Casado, de una manera unilateral, sin informar ni acordar las acciones necesarias, generando más problemas que soluciones".