Durante los meses de julio y agosto las Jefaturas Provinciales de Tráfico de Castilla y León han realizado 24.588 pruebas para obtener el permiso de conducir, lo que supone 542 exámenes más que en el verano de 2019, a pesar de la situación de pandemia en la que se han tenido que adoptar los protocolos sanitarios para evitar contagios.
En concreto, en León, se han realizado 2.327 exámenes teóricos (298 más que el año pasado); 274 de destreza (33 menos); 1.202 de circulación (51 más que en 2019), lo que supone un total de 3.803 exámenes este verano, 316 más que el anterior.
En la Comunidad, durante este verano, se han realizado 11.934 exámenes teóricos, 2.716 de destreza (moto, camión y autocar) y 9.938 de exámenes prácticos.
Las autoescuelas y las jefaturas provinciales de tráfico reanudaron sus actividades en la fase II de la desescalada y a partir de ese momento se retomaron los exámenes para la obtención del permiso de conducción, adoptando los correspondientes protocolos sanitarios. Hay que destacar que la Dirección General de Tráfico fue el primer organismo de la Administración en reanudar los exámenes tras el parón de la pandemia.