Corría el año 1971, cuando un joven médico-cirujano se incorporaba a la enfermería de la plaza de toros pucelana en calidad de ayudante del entonces jefe de enfermería doctor Angel Palencia. “Fue a raíz de una grave cogida que afectó a la femoral, -nos comentó el doctor Mateo- entonces, en el cuadro médico de la plaza no había cirujano cardiovascular y, dada mi amistad con el doctor Palencia, me ofreció incorporarme a la enfermería y aquí llevamos 50 años”.

Pasó el tiempo, y tras la jubilación de su antecesor Antonio Mateo se hizo cargo del equipo médico. “Fue en 1982, -comentaba el cirujano a los micrófonos de Grana y Oro- tenía previsto dejar estas labores tras la feria de este año, pero la pandemia lo impidió, así que esperaremos al 2021, si Dios nos da vida”.

El 2021 marcará el final de una brillante etapa, pero antes nos recordó los momentos trágicos y delicados por lo que ha pasado este cirujano que, a lo largo de 50 años, atendió en la enfermería del coso a numerosos toreros, novilleros, subalternos, monosabios, espectadores y ganaderos, como fue el caso del criador de toros Daniel Ruiz. “Ha sido el único toro que le ha cortado una oreja a un ganadero”, nos comentaba sonriente e irónico el galeno.

[GALERÍA DE IMÁGENES] ARCHIVO DE LA ENFERMERÍA DE LA PLAZA DE TOROS Y ARCHIVO NOTICIASCYL 

Ocurrió en la feria de 1999, cuando un toro de Jandilla salió disparado desde toriles saltando “olímpicamente” la barrera, yendo a estrellarse contra el burladero donde el ganadero albaceteño veía el festejo. El resultado fue el arrancamiento de una oreja que, felizmente, fue repuesta por el equipo médico.

Nuestro protagonista es directivo de la Sociedad Española de Cirugía Taurina, y con tal fin organizan cada anualidad un acto en la Academia de Medicina de Valladolid. En cada ceremonia suelen reunirse colegas de otras plazas a los que se les conceden títulos de nuevos académicos. El último otorgado ha sido al doctor Fernando Carbonell, cirujano de las plazas de toros de Valencia, Utiel y Requena.

Por último, el doctor Mateo nos habló sobre el agradecimiento de los toreros, tal es el caso de Julio Robles. “Fue mi primera intervención en la plaza como cirujano, -nos comentaba Mateo- y sí, todos los toreros en menor o mayor medida son agradecidos con los equipos médicos que los han intervenido. Robles, además de agradecido, tuvo la generosidad de regalarme unos gemelos en forma de botón charro.

Gracias al doctor Mateo por las facilidades y atenciones, y a Carlos Guerras, conserje del coso, quien nos facilitó el acceso a las instalaciones de la plaza para la realización del reportaje emitido el pasado fin de semana en Grana y Oro.