El socialista zamorano Carlos Fernández se ha convertido en el primer procurador de etnia gitana en las Cortes de Castilla y León. La dimisión de su predecesora, Inmaculada García Rioja, tras dar positivo en un test de alcoholemia, ha hecho que Carlos Fernández sea la primera persona de etnia gitana en sentarse en un sillón de procurador de la Cámara regional. 

Noticiascyl Zamora charla con él antes de su estreno en un Pleno de las Cortes, para conocer sus aspiraciones en este nuevo cargo, cómo ha sido su vida dentro de la política y descubrir la importancia de que una persona gitana, por fin, llegue a un cargo de este tipo en Castilla y León.

Pregunta.- ¿Cómo ha sido la noticia de que te conviertes en procurador de las Cortes?

Respuesta.- Ha sido tremendamente inesperada, porque la forma en la que se ha dado es bastante agridulce. Pero afrontando esta situación con esperanza y ganas 'de dar caña'. 

P.- Además viene con título: eres la primera persona de etnia gitana que llega a procurador de las Cortes de Castilla y León. ¿Tienes más responsabilidad por ello de 'dar caña'?



R.- Es como con tantas otras cosas cosas. Si eres un estudiante gitano y suspendes dicen: "hay pobrecito que es gitano". Entonces con esto pasa un poco igual, si no haces las cosas como no debes van a decir lo mismo: "hay pobrecito que es gitano". Por eso, para intentar evitar el 'apiadamiento social' habrá que seguir 'dando caña' dentro de mi perspectiva, que es desde una vida dentro de una minoría social. Voy a dar una visión que puede que hasta ahora no se haya ofrecido. 

P.- ¿Tienes que demostrar el doble que los demás?



R.- Normalmente sí. Por ejemplo en el tema de formación. El alumnado gitano que llega a los últimos años de la ESO tienen que demostrar el doble, porque sino llega este 'apiadamiento', que se justifica solo por el hecho de ser gitano. 

P.- ¿Se da la sociedad por vencida antes con el alumnado gitano cuando fallan?



R.- Sí, se tiene el pensamiento de "ya ha desistido, como tantos otros". Y puede ser que sea mal estudiante o tenga un mal curso, nada más. Es ese tópico social. Entonces hay que luchar contra él. Y en la vida parlamentaria habrá que ver como son las circunstancias.

P.- Por ahora, ¿cómo te estás informando? ¿Con tus compañeros? 



R.- Hablo mucho con Ana Sánchez y voy poco a poco presentando toda la documentación que hace falta para empezar.

P.- ¿Cómo te esperas que vaya a ser esa primera sesión?



R.- Me da mucho respeto porque son completamente novato en esto. Cuando tengo tiempo sí me gusta ver alguna sesión, también del Congreso y el Senado, pero ver los 'toros' desde la barrera es muy fácil. Pero cuando ya tienes la responsabilidad... ¡Uf! Tendré que ir aprendiendo que opciones hay para presentar Proposiciones No de Ley, mociones...etc.

P.- ¿Cómo se ha tomado tu familia y amigos este nombramiento tan repentino?



R.- Tan sorprendidos como yo. Es que se ha dado una circunstancia con la que no contábamos, pero muy contentos, la verdad. Mi familia está muy orgullosa y muy emocionada. 

P.- ¿Y ya te han puesto 'deberes' de que tienes que mirar por ellos y por vuestra etnia?



R.- No. Lo que sí que me han dicho es "no hagas bobadas por la calle, que ahora tienes una imagen". ¡Ni que fuera yo el más fiestero de Zamora! Pero están contentos y mis amigos igual. También he recibido mucho apoyo de los compañeros de la Fundación del Secretariado Gitano, varias entidades gitanas de España y de Beatriz Carrillo (diputada gitana por el PSOE en el Congreso). Ha sido un apoyo bestial. 

P.- ¿Qué tabues te gustaría romper desde tu nuevo cargo?



R.- Yo creo que el hecho de que haya una persona gitana en las Cortes de Castilla y León ya es un hecho importante. Más teniendo en cuenta que se tiene la percepción que esta Comunidad es muy conservadora, un nido de votos de Partido Popular, donde ya se demostró en las anteriores Elecciones que no es así, porque no ganaron. Pero igualmente es una circunstancia que hay que celebrar. 

P.- ¿Quizá al ver personas como tú o Beatriz Carrillo en estos puestos puede que anime a las personas gitanas a participar en política?

R.- Claro que sí. Creo que es fundamental que la población gitana participe y ya hay grupos de juventudes gitanas que hacen mucho activismo y movimiento social. Cada uno que participe de la vida pública como mejor le convenga, para contribuir y dar la perspectiva dentro del pueblo gitano. Porque, generalmente, las cosas que se hacen para nosotros se realizan desde una mirada un poco paternalista, de "vamos a tomar decisiones que afectan a los gitanos, pero sin que estén decidiendo los propios gitanos". 

P.- Hacer cosas para vosotros sin ni siquiera preguntar qué necesitáis.



R.- Claro. Hacer, por ejemplo, leyes de inclusión social, que seguro que están hechas con la mejor voluntad del mundo, nadie lo pone en duda, pero al final van a haber perspectivas, que desde fuera no se van a tener en cuenta. Entonces, creo que es muy positivo en este aspecto. 

P.- Generalmente, dentro de la comunidad gitana el tema político, ¿cómo es?



R.- Se ve como una cosa muy alejada. Creo que es porque, generalmente, los roles políticos han estado dentro de la propia comunidad. Lo que sí es cierto es que se va abriendo la veda poco a poco y ya han tres gitanos en el Congreso de los Diputados, unos cuantos concejales a nivel nacional, y a nivel autonómico también está la diputada de Ciudadanos de la Asamblea de Madrid, Carla Santiago. Entonces, poquito a poco, vamos haciendo hueco. Al final es cierto que somos una minoría, pero la más grande de España, y se hace necesario que estemos en los espacios de toma de decisiones y se nos escuche.