El Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León, centro dependiente de la Consejería de Cultura y Turismo, finalizó la restauración de un incunable perteneciente a la colección de la Catedral de Segovia, que ya está de vuelta en su archivo. Se titula ‘Incipivny eingularia domini Ludovici de Roma’, una obra datada en el 1473. El libro fue encargado por el Obispo de Segovia, Arias Dávila al impresor Juan Parix y recoge un conjunto de estudios breves sobre obras de carácter jurídico de Ludovico Pontanore.

Se denomina incunable a toda obra echa entre la invención de la imprenta (siglo XV) y finales del siglo XVI.

Los trabajos de restauración se centraron en frena el proceso de deterioro y recuperar el valor tanto funcional como estético del incunable. La restauración ha consistido en la limpieza en seco para la retirada de la suciedad superficial, tanto del cuerpo de la obra como de su encuadernación.

Las hojas contenían numerosas manchas de humedad y algunas pigmentaciones requirieron de tratamientos específicos para absorber la suciedad por capilaridad. Para consolidar el soporte del antiguo papel del incunable, se incorporó papel de naturaleza neutra.

Entre las labores destaca la recuperación que se ha hecho de la lectura, antes distorsionada, del ornamento de la cubierta, además de restituir las pérdidas de la cubierta de cuero. Los nervios del libro fueron reforzados con nuevas costuras, así como en el interior de la lomera.

La restauración necesitó de un estudio previo de la pieza. Para ello, se realizaron imágenes digitales: macro y micro fotografías para observar con más detalle el estado de la obra. También se llevaron a cabo análisis de laboratorio mediante la aplicación de técnicas de microscopia y espectroscopia infrarroja, para obtener información sobre la procedencia y manufactura del papel. En su totalidad, la restauración ha supuesto una inversión de 18.000 euros.

Por último, el Centro elaboró una caja para conservar y proteger el incunable de los posibles impactos físicos y medioambientales en su vuelta al archivo de la Catedral de Segovia.

Una obra artística hecha libro



El valor artístico del libro reside especialmente, en su encuadernación. La piel del encuadernado es de color rojo y sobre él, se muestra una decoración de estilo mudéjar realizada mediante la técnica del gofrado, que consiste en producir el relieve en el papel por efecto de la presión sobre éste. 



La decoración se distribuye en un esquema de orlas encuadradas con motivos que se repiten de forma encadenada: rombo anudado con estrella, palmetas y cruceta de lazo. En el centro del dibujo, hay un rectángulo estrecho. El libro cuenta con una solapa que cubre el corte delantero, que se cierra con dos cintas de piel anudadas.

La materia prima que constituye el incunable es de una pasta procedente de trapos con un porcentaje mayoritariamente de lino. Sus características y filigranas se asocian a papeles procedentes de molinos españoles levantinos e italianos. En las tintas los componentes básicos son pigmento negro de humo y un aglutinante graso.