A la espera de que en las próximas horas, la Junta de Castilla y León acuerde las medidas respectivas a toques de queda, número de personas en reuniones o cierre perimetral, el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea ha dado las primeras pinceladas a lo que será el plan sanitario definitivo de cara a las fechas navideñas. Destacan recomendaciones a los ayuntamientos, la máxima de reducir todo lo posible cualquier aglomeración de personas y el control de aforo por las calles.
En primer lugar, la Junta exigirá a los ayuntamientos que tomen las medidas necesarias en vías y espacios públicos para en control del aforo, incluido en aquellos lugares donde se prevea un elevado número de personas. Para ello deberán organizar itinerarios y controles para dirigir el trasiego de los peatones.
La única pincelada sobre los horarios que Igea ha desvelado es que, tanto el 24 como el 31 de diciembre, el cierre de la hostelería se mantiene hasta las 22 horas, sin permitir la entrada de nuevos clientes a partir de las 21 horas. Una idea que choca con el posible atraso del toque de queda a las 1.30 horas que se prevé para esos dos días, pero que para Igea "no tenía sentido epidemiológico cambiarlo".
Sobre las prohibiciones, no se podrán organizar actos para celebrar las doce campanadas, y los ayuntamientos deberán informar convenientemente de que no se concurra en estos actos. Igualmente queda suspendida la expedición de permisos para celebrar actividades recreativas en los municipios. La prohibición se hace extensiva a cualquier evento deportivo que puedan tener gran afluencia de público, como la San Silvestre.
Con respecto las cabalgatas, la Junta no prohibirá su celebración, pero si establece que deben celebrarse de forma exclusivamente estáticas, con público sentado con distancia de 1,5 metros, y con aforos al 50%, además del uso obligatorio de mascarilla desde los dos años, y con el consumo de alimentos prohibido. También se desaconsejará celebrar eventos navideños o cualquier otro con riesgo de aglomeraciones, para que se sustituyan por actos virtuales, pero en el caso de celebrarse debe hacerse en recintos acotados, con entrada y salida independientes.
Las visitas a los Belenes también deben hacerse en recintos acotados, donde pueda asegurarse la distancia de metro y medio, y cuya estancia no supere los quince minutos.
Y con respecto a la vuelta de los estudiantes a sus casas, no será de obligado cumplimiento, pero se les aconseja que extremen sus contactos diez días antes de su vuelta.
Visitas a residencias de mayores y personas discapacitadas
La Junta flexibiliza la visita a centros residenciales, de hasta dos personas por usuario y de dos horas de duración. Eso sí, desde la administración se aconseja realizar siete días de aislamiento previos a la visita para minimizar los riesgos de contagio y propagación. Además, en aquellos centros en los que se organicen cenas entre residentes y familiares, se deben presentar dos PCRs negativas recientes, para poder acudir.