El hielo y la nieve caídos en las últimas horas provocan el corte al tráfico de diez tramos de carreteras de Castilla y León, hacen preciso el uso de cadenas en otras 17 y permanecen cerradas a caminiones y articulados otras 24, según la información de la Dirección General de Tráfico (DGT) recogida por Europa Press.
En concreto, cerrados al tráfico se encuentran, en la provincia de Burgos, la BU-570 en Estacas de Trueba; la BU-571 en Portillo de la Sía; la BU-572 en Portillo de Lunada; la CL-629 en el Puerto de Bocos, Merindad del Río Ubierna y La Mazorra.
Mientras, en León permanecen intransitables la LE-126 en Encinedo; la LE-233 en Boca de Húergano; LE-321 en Valdelugueros; LE-233 en el alto de Monteviejo, la LE-331 y LE-333 en Puebla de Lillo; la LE-491 en Cabrillanes. A estas se suma, por la presencia de hielo, la carretera SA-203 en El Cabaco, en la provincia de Salamanca.
Además, se precisa de cadenas para circular en la AV-500, en Santa María del Cubillo; AV-501, en Navalperal de Pinares; AV-932, en Puerto de Peñanegra; BU-571 en Portillo de la Sía; BU-572 en Portillo de Lunada; N-232 en Oña (Burgos); CL-629 Puerto del Cabrio (Burgos); N-629 en Oña y Puerto de los Tornos (Burgos); LE-331 en Puebla de Lillo; N-621 en Oseja de Sajambre (León); N-625 en Riaño (León); la CL-627 en Piedrasluengas (Palencia) y la DSA-180, en La Covatilla.