La tercera ola COVID ya está aquí. Lo confirmaba la consejera de Sanidad, Verónica Casado, en su tradicional rueda de prensa para valorar los datos epidemiológicos de Castilla y León y lo confirman esos datos.
Valladolid sigue aumentando su incidencia acumulada, que se sitúa ya, según datos del 5 de enero, en 151,86 casos por 100.000 habitantes a los 14 días, y en 88,73 en la última semana. La provincia sigue siendo, de las 9 de la Comunidad, la más golpeada por los nuevos contagios, 184 el pasado martes y suma 824 decesos desde el comienzo de la pandemia.
Un indicador que complica la situación es el RT, conocido también como número reproductivo básico instantáneo que pasa por ser el promedio de personas que cada persona contagiada puede llegar a infectar.
La provincia de Valladolid ha pasado de tener un número de 0,59 el 27 de noviembre, con las restricciones, a un 1,45 a fecha de día 1 de enero, según los datos de la Junta de Castilla y León. Por lo que ahora, una persona contagiada con COVID puede transmitir la enfermedad a 1,5 personas.
Panorama difícil el que se viene en toda Castilla y León en general y en Valladolid en particular con la tercera ola del COVID.