El Instituto Nacional de Estadística ha publicado este jueves las cifras de población por provincias referentes al primer semestre de 2020 en el que destaca un descenso de la población amplio, de casi 10.000 personas, en el conjunto de Castilla y León.
En concreto, son 9.998 personas menos las que hay, según los datos del INE, pasando de 2.401.306 a 2.391.308. Un descenso que, además, se amplía con respecto a años pasados debido a la violencia del coronavirus. No en vano, en 2019, durante el mismo periodo de tiempo, la pérdida de población fue de 5.003 personas, la mitad que en este.
Ello quiere decir que al día Castilla y León incrementó su pérdida de población en 55 personas, por las 28 de 2019, una cifra que, por otro lado, sigue siendo muy importante.
Por provincias, la población cayó en todas, principalmente en León y Salamanca. La primera pasó de 459.236 a 456.723 y la segunda, de 331.081 a 328.784, en ambos casos por encima de 2.000. En concreto, en León se perdieron 2.513 personas y en Salamanca, 2.297.
Tras ella llegaría Zamora, con una caída por encima de 1.000 personas, desde 171.661 a 170.537, mientras que Valladolid pasó de 520.737 a 519.819. En Ávila, la población cayó cerca de 800 personas, desde 158.895 a 158.098, y en Burgos, en 600, de 355.693 a 354.996.
En Palencia también fueron cifras similares, de 159.906 a 159.316; al igual que en Segovia, de 154.205 a 153.623. por último, en Soria, la pérdida de población fue de 89.892 a 89.412. Todos los datos son referentes del 1 de enero al 1 de julio de 2020.
En términos porcentuales, la caída de población en Castilla y León supone un 0,4% menos en la que es la mayor bajada de toda España.