El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, evidenció este lunes su “compromiso con las mujeres privadas de libertad” visitando a las internas que cumplen condena en el módulo mixto del Centro Penitenciario de Topas (Salamanca).



Fernández Marugán realizó esta visita, según especificó a través de un comunicado recogido por Ical, durante el primer 8M que se celebra tras el décimo aniversario de las Reglas de Bangkok de Naciones Unidas, normativa que, en sus palabras, “supuso un gran avance para la defensa de los derechos de las mujeres privadas de libertad”.



El Defensor se desplazó a este módulo acompañado de técnicos de la Institución, en su condición de Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP), después de haber visitado otras instalaciones donde se encuentran mujeres privadas de libertad. En esta inspección, el MNP quiere comprobar si el trato que reciben mujeres y hombres en el módulo mixto es “completamente igualitario”.



Según datos de Instituciones Penitenciarias, en la actualidad existen en España módulos mixtos en nueve centros penitenciarios y en ellos conviven 121 mujeres y 543 hombres. Con este tipo de inspecciones, el MNP quiere conocer de primera mano la realidad de estos módulos y “ver si se produce alguna restricción basada en el sexo que pueda vulnerar los derechos de las mujeres”.



Durante la visita, el Defensor se entrevistó con los responsables del centro y pudo charlar con algunas de las mujeres internas en el módulo mixto para conocer los cambios que han experimentado tras pasar de cumplir pena en un módulo exclusivo de mujeres a hacerlo en uno mixto en el que conviven a diario con hombres. Fernández Marugán les transmitió “el compromiso” de la Institución que dirige por velar por la defensa y respeto de todos sus derechos. 



Proyecto 'Cárceles y género'



La situación de las mujeres privadas de libertad preocupa especialmente al Defensor del Pueblo que ya en 2018 inició el proyecto 'Cárceles y género' en el marco del cual el personal del MNP realiza visitas a lugares de privación de libertad atendiendo específicamente a la situación de las mujeres privadas de libertad.



Como consecuencia de estas visitas con enfoque de género, el Defensor ha formulado más de una veintena de recomendaciones a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias. Así, se han pedido mejoras para atender a las mujeres víctimas de violencia de género, para asegurar un uso inclusivo del lenguaje en los formularios penitenciarios, para perfeccionar los datos estadísticos de mujeres privadas de libertad o para incrementar la formación del personal penitenciario en cuestiones de género. 



El MNP también se interesó especialmente por la situación de las mujeres gitanas privadas de libertad y realizó numerosas sugerencias en materia de acceso al trabajo, medios coercitivos, comunicaciones, espacios, maternidad y Sección Abierta.