La Inspección de Trabajo de León ha informado que las enfermeras del Hospital del Bierzo se contagiaron de Covid-19 "porque no dispusieron de medidas de protección frente al SARs-CoV-2 en su puesto de trabajo y ahora es la Dirección Provincial del INSS en León la que debe reconocer definitivamente esta situación para hacer efectivo el derecho a ver incrementadas en un 30% sus prestaciones de Seguridad Social derivadas de un accidente de trabajo", según informa el sindicato Satse, que denunció ante la Inspección de Trabajo esa falta de protección que sufrieron distintas enfermeras en su trabajo durante los primeros meses de la pandemia y del estado de alarma.
El Equipo de Valoración de Incapacidades del INSS considera que ante la falta de medidas de protección que sufrieron estas enfermeras en concreto procede el recargo de las prestaciones de Seguridad Social, ya que ha habido “un incumplimiento de la empresa en materia de prevención de riesgos laborales”. Así, cita que “que el accidente laboral tiene lugar porque el trabajador no contó con los medios de protección necesarios, en concreto, carencia de mascarillas”, lo que supone la infracción de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, en relación a la protección de los trabajadores contra los riesgos relacionados con la exposición a agentes biológicos durante el trabajo.
Las enfermeras, asistidas por SATSE León, solicitaron el recargo en las prestaciones a la Seguridad Social derivadas del accidente de trabajo por contagio de Covid-19. En sus argumentos a la Inspección de Trabajo, las enfermeras señalaron que en su puesto de trabajo en el Hospital del Bierzo no se disponía de medidas de ventilación y organizativas, que se carecían de elementos de protección personal; en concreto la semana del 23 al 29 de marzo de 2020 no se suministraron EPIS, solo una mascarilla quirúrgica que tuvieron que reutilizar, y que solo el 3 de abril se le facilitó una mascarilla FP2 y una pantalla para utilizar solo cuando se llevara a cabo la administración de nebulizaciones.
Esos días aumentó la carga asistencial debido a la reubicación de pacientes y hubo presencia de acompañantes que fueron Covid positivos; también hubo demora en el diagnóstico de pacientes, con fiebre y patología compatible, a los que inicialmente no se les realizó una prueba de detección del coronavirus, pero luego dieron positivo.
La Inspección de Trabajo cita en su informe que el Ministerio de Sanidad indicó que “la protección respiratoria generalmente recomendada para los profesionales de la salud que puedan estar en contacto a menos de 2 metros con casos posibles, probables o confirmados es una mascarilla autofiltrante tipo FFP2 o media máscara provista de filtro contra partículas P2”. Asimismo, desde las primeras instrucciones sanitarias se prescribía el uso de EPIS para sanitarios en contacto con positivos, EPIS que no se facilitaron a los profesionales sanitarios.