Pablo Sáez Reyes es un abulense de nacimiento que vive en la actualidad en Valladolid y que a sus 16 añitos ha conseguido una medalla de plata en la modalidad online de la XXV Olimpiada Informática que se celebró los pasados días 16 y 17 de abril.
Charlamos con este alumno de 4º de la ESO del IES Núñez de Arce, que lleva 8 años programando y siente una especial predilección por las matemáticas en esta entrevista para El Español Noticias de Castilla y León.
Pregunta. ¿Qué importancia ha tenido su padre para que a usted le haya interesado tanto el mundo de la informática?
Respuesta. Cuando era muy pequeño mi padre me enseñó a utilizar un programa con el que se resolvían problemas de electrónica utilizando puertas lógicas y viendo que se me daba bastante bien y que me gustaba mucho, me apuntó a una academia en la que enseñaban a programar con Scratch, que es un lenguaje de programación visual.
Desde entonces siempre ha intentado que continúe programando, orientándome y ayudándome con recursos que él utiliza, aunque reconoce que ya he superado sus conocimientos.
P. A los 8 años ya programaba. Hábleme de ello.
R. Fue en la academia con el Scratch donde realmente empecé a programar, progresé rápido y el segundo año empecé a trabajar con placas de Arduino, que son placas electrónicas que disponen de un microcontrolador al que se le pueden conectar sensores, actuadores y periféricos.
El lenguaje para programar las placas Arduino es similar a C++, es como una biblioteca -un complemento de C++-.
La principal diferencia entre Scratch y Arduino es que mientras que en Scratch se programa arrastrando bloques, en Arduino hay que escribir código, aunque los fundamentos son iguales, como sucede con casi todos los lenguajes de programación. Este fue el cambio más importante y complicado, pero me ilusionó porque aumentaba las posibilidades, dadas las limitaciones de Scratch. Después de estar cuatro años en la academia, dejaron de impartir clases de programación.
Poco después me centré en las matemáticas, gracias a haber sido seleccionado para participar en un programa de Estimulación del Talento Matemático (ESTALMAT) que lleva adelante la Asociación Castellana y Leonesa de Educación Matemática “Miguel de Guzmán”. Es ahí donde descubrí la belleza de las matemáticas, las cuales son mi auténtica afición y vocación.
En los últimos años prácticamente no había programado, pero cuando se inició el confinamiento retomé el interés por la programación, centrándome en la programación WEB -HTML, CSS, JavaScript, PHP, SQL, TypeScript, SASS, JQuery, BootStrap… - tanto programación en el lado del cliente como en el lado del servidor, al principio de forma autodidacta y después ayudado por un profesor.
En el verano, cuando dejé de dar clases con el profesor, por curiosidad, comencé con la programación en Python por recomendación de mi padre y retomé la programación en C++.
P. Además, es autodidacta como manifestó en la entrevista previa a la Olimpiada Informática. ¿Cómo se forma?
Normalmente los recursos de programación los busco a través de Internet o aplicaciones del teléfono móvil
R. Normalmente los recursos de programación los busco a través de Internet o aplicaciones del teléfono móvil. Son formas muy prácticas de empezar a programar que están al alcance de cualquiera.
Al comienzo de este curso escolar tuve la suerte que mi madre viera que la Escuela de Ingeniería Informática de la Universidad de Valladolid iba a realizar una prueba de selección para realizar un programa de entrenamiento para participar en la Olimpiada Informática de Castilla y León -OICYL-. Pude superar la prueba sin problemas, dado que se trataban de problemas de lógica similares a los que veía en el programa ESTALMAT y me resultaron bastante sencillos de resolver, de hecho, varios de los alumnos que fuimos seleccionados habíamos participado en el programa ESTALMAT.
En el programa de entrenamiento me enseñaron los conceptos básicos de la programación competitiva y gracias a lo que pude aprender conseguí el primer puesto en la OICYL, de lo cual estoy muy orgulloso. Invertí prácticamente todo el premio de la OICYL en libros de programación competitiva y aunque me costó, al principio, logré avanzar y mejorar en la resolución de problemas.
Tres semanas después de la OICYL la Escuela de Ingeniería Informática de la UVa, como parte del premio, comenzó a impartirnos a mí y al segundo clasificado clases para preparar para la Olimpiada Informática Española -OIE-.
En estas clases nos recomendaron presentarnos a los clasificatorios abiertos para la OIE con el fin de ganar experiencia y después de haber participado en el segundo clasificatorio una Universidad privada con sede en Cataluña nos ofreció a los participantes un mes de formación en el programa Leagues of Code orientado a la programación competitiva para estudiantes preuniversitarios. Nos dijeron que seleccionarían a los mejores participantes del programa para una beca de formación de un año.
A partir de ahí combiné el programa de entrenamiento de la UVa, con el curso de la otra universidad y el aprendizaje autodidacta hasta la Olimpiada.
Actualmente, al haber obtenido la medalla de plata en la en la OIE, me han concedido la beca del programa Leagues of Code y estoy realizando el curso.
P. ¿Qué es para usted la informática? ¿Cómo la definiría?
R. Para mí la informática es una forma de matemática aplicada, de hecho, se da la circunstancia que el enunciado de varios problemas en la Olimpiada se realizaba en términos estrictamente matemáticos. Se puede definir la informática como la acción de crear algoritmos que puedan resolver diferentes problemas y lo que más me gusta de ella es que en su resolución se puede encontrar el mismo ingenio y belleza que cuando se resuelve cualquier problema matemático.
P. Antes de acudir a esa Olimpiada aseguraba, volviendo a hacer mención a esa entrevista previa, que una de las cosas más importantes que valoraba de la experiencia era el aprendizaje. ¿Ha aprendido mucho?
R. Sí, estoy muy contento, tanto con lo que he aprendido en la UVa, como en el programa Leagues of Code, como de forma autodidacta. Creo que esto me puede ayudar de cara a mi futuro profesional. Lo que más valoro es haber obtenido la beca de Leagues of Code, espero aprender mucho dado la gran calidad de los profesores que lo imparten al ser muchos de ellos medallistas en competiciones nacionales e internacionales.
P. El 16 y 17 de abril se celebró la modalidad online de esa XXV Olimpiada Informática Española. ¿Cómo recuerda la experiencia?
R. Lo recuerdo como una experiencia muy interesante. Los organizadores nos hicieron entrevistas personales a todos los participantes para emitirlas durante la retransmisión de la competición y que los espectadores pudieran saber algo más de nosotros. Fueron muy agradables durante las mismas.
La semana anterior a la competición organizaron para los participantes una videollamada con un juego estilo Scape Room para que pudiéramos interactuar entre nosotros y conocernos mejor a pesar de la distancia por la pandemia de la COVID-19. Nos divertimos mucho y después estuvimos hablando hasta altas horas de la madrugada.
La competición estuvo muy bien organizada y pese a competir cada uno desde nuestra casa no tuvimos ningún problema técnico. Recuerdo que estuve muy nervioso ya que hubo varios momentos en los que estuve entre los primeros cuatro puestos con opción a una de las medallas de oro y clasificación para la Olimpiada Informática Internacional, desafortunadamente en los últimos minutos pasé al quinto puesto obteniendo la primera medalla de plata.
P. Fue elegido en la I Olimpiada de Castilla y León para participar en el campeonato nacional. Casi nada.
R. Estoy muy contento con ese resultado, la verdad es que no me lo esperaba dado el poco tiempo que llevaba con la programación competitiva. A parte de ser el Primer Clasificado también conseguí el premio de Joven Promesa concedido al mejor programador de la ESO.
Estoy muy agradecido a la Escuela de Ingeniería Informática de la Universidad de Valladolid por la formación del programa de entrenamiento para la OIE.
P. Usted fue 5º y se llevó una medalla de plata. Casi nada… Estará orgulloso.
R. Estoy muy orgulloso por ese resultado, la verdad es que nada más finalizar la competición me quedé un poco decepcionado porque vi alguna de las medallas de oro y la clasificación para la Olimpiada Informática Internacional muy cerca.
Era muy difícil saber el nivel al que estaba realmente entre los participantes y, a lo largo de la competición, a medida que vi que iba teniendo oportunidades porque me mantenía en los puestos altos de la clasificación, me fui animando.
P. Finalizó a tres puntos de la cuarta medalla de Oro. ¿La vio cerca?
R. La vi muy cerca, de hecho. Cuando quedaban 30 minutos para el final de la competición estaba 4º y, a pesar de intentar conseguir más puntos, no lo logré.
Los últimos minutos de la competición fueron muy intensos
Los últimos minutos de la competición fueron muy intensos porque estuve muy cerca de resolver un apartado de un problema y estuve luchando hasta el último segundo. Al final se acabó el tiempo y la solución que tenía para enviar no era correcta, aunque en ese momento no lo sabía… casi se me para el corazón cuando se acabó el tiempo.
Aunque durante toda la competición se podía ver la puntuación de todos los participantes, la última media hora fue a ciegas. Congelaron las puntuaciones de todos y no podíamos ver si había cambiado. En ese momento era cuarto y estaba a punto de conseguir una de las medallas de oro, pero desafortunadamente cuando revelaron la clasificación final vi que el que estaba sexto había pasado al cuarto puesto y por lo tanto yo pasaba automáticamente al quinto puesto.
La verdad es que podía haber pasado cualquier cosa porque estábamos muy igualados.
P. Mirando al futuro, ¿Quiere dedicarse a algo relacionado con la informática? ¿Cuál es su sueño o su trabajo soñado?
En el futuro me gustaría un trabajo más relacionado con las matemáticas que con la informática
R. En el futuro me gustaría un trabajo más relacionado con las matemáticas que con la informática y me gustaría ser investigador, sin embargo, las matemáticas están cada vez más relacionadas con la programación y creo que mi trabajo soñado combinaría ambas.
P. Un objetivo y un deseo a corto plazo.
R. Mi objetivo a corto plazo es obtener un buen resultado en la Olimpiada Regional de Matemáticas de 4º de la ESO cuya primera fase será el 6 de mayo.
También me gustaría clasificarme para la Olimpiada Matemática Española y la Olimpiada Informática Española de 2022 y obtener medallas de oro para acudir a las competiciones internacionales, aunque soy consciente de la dificultad que tienen esos objetivos, trato de esforzarme al máximo para lograrlos.