Recientemente, se han empezado a publicar en la propia web de la Junta de Castilla y León los primeros resultados de los censos de fauna que se han realizado entre 2018 y 2020, con el objetivo de que puedan ser consultados por todos los ciudadanos. Los resultados regionales obtenidos hasta la fecha confirman la extraordinaria biodiversidad de la provincia de Zamora.
Estas actuaciones se realizan sobre el terreno por los agentes medioambientales y celadores de medio ambiente, coordinados por los técnicos del Servicio Territorial de Medio Ambiente, actuando de forma sistemática y en equipos para ampliar el conocimiento de estas especies emblemáticas, muchas de ellas auténticas joyas de nuestro patrimonio natural.
Los principales objetivos del Plan de Monitorización del Estado de Conservación de la Biodiversidad en Castilla y León, enmarcado en el seguimiento de la Red Natura 2000, se centran en obtener información, entre otros, sobre la población, distribución actual y amplitud geográfica de las distintas especies, así como de sus evoluciones y tendencias.
De cara a prever las perspectivas futuras de conservación de cada especie también se tienen en cuenta sus hábitats, amenazas y presiones, ya sean accidentales, por capturas o por caza y pesca en las especies cinegéticas.
Sirva como ejemplo el hecho de que, si nos referimos a Castilla y León, en Zamora se localizan el 38,2 % de las 14.787 avutardas censadas en 2019, el 36,8 % de las 19 parejas de águila perdicera existentes en 2020, el 24 % de las 45 parejas de cigüeña negras censadas en 2018 o el 17 % de las acuáticas censadas en invierno de 2019, a pesar de que en las fechas de censo los humedales de la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, principal zona húmeda de Castilla y León, permanecían prácticamente secas. En los próximos meses se espera que se sigan publicando los resultados de los censos y estudios en marcha.
Algunos de los censos realizados, como los de aves acuáticas invernantes, mesomamíferos carnívoros, parejas reproductoras de garcilla bueyera, martinete, garceta común y garza imperial, cigüeña negra, águila imperial o águila perdicera, cubren todo el territorio provincial.
En otros casos el ámbito geográfico se ciñe a zonas concretas de alto valor ecológico para la especie muestreada. La Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila es el principal foco de realización de estas tareas, con sus censos de fauna acuática y avutarda. Además de la Reserva, el ámbito de actuación se amplía a la Comarca de Guareña en el caso de la ortega y la ganga, a Aliste y Benavente en el caso del sisón, y a Tierra del Pan, Guareña y Cañones del Duero para el cernícalo primilla.
En cuanto a los aguiluchos pálido y cenizo se hacen censos en un tercio de la provincia, y para el alimoche, buitre leonado, águila real y halcón peregrino se centran en los Arribes del Duero.
La delegada territorial, Clara San Damián, ha reconocido que “una de las fortalezas que tiene la provincia de Zamora, además de toda su riqueza patrimonial y cultural, es también la biodiversidad, en este caso animal. Es por ello por lo que la Junta trata de poner en valor todos sus recursos, y estos censos convierten a nuestra provincia en un atractivo turístico de primer nivel”.