La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades en funciones, Isabel Blanco, pidió hoy que los ucranianos refugiados que lleguen a Castilla y León lo hagan por los "cauces oficiales" para así tenerlos localizados y, sobre todo, poder prestarles la "mejor ayuda posible". Pese a reconocer que todo lo relacionado con los refugiados es una competencia estatal, abogó por que las personas que huyen del conflicto que padece Ucrania, tras la entrada de las tropas rusas, sean, primero, identificados para gestionar los papeles necesarios como el estatus de refugiado y el permiso de residencia para poder acceder, en condiciones normales, a los servicios de sanidad y educación para la escolarización de sus hijos, según ha informado la agencia Ical.
En un receso de la Comisión Interconsejerías para coordinar las acciones de la Junta ante la situación de Ucrania, Blanco mostró hoy su preocupación con los menores ucranianos no acompañados de 16 y 17 años que lleguen a Castilla y León ya que son considerados, en algunos ámbitos, como mayores de edad, aunque en España no lo sean. "Si viene un número elevado de menores no acompañados pueden ser, sobre todo, chicos más mayores por ese condicionante ya que al no ser allí menores de edad se les pida que se incorporen a luchar contra las tropas rusas", añadió.
Además, se refirió a las dos situaciones diferentes que provoca la crisis humanitaria de Ucrania en materia de refugiados. Por un lado, los adultos y familias que vengan a España y Castilla y León, ya sea a través de cauces oficiales o bien gracias a la comunidad ucraniana asentada en el país, que deberán gestionar el estatus de refugiado y los papeles de permiso de residencia, además de los recursos necesarios de sanidad (tarjeta sanitaria y vacunas) y educación. Por otro, está un grupo "más delicado" como son los menores extranjeros no acompañados que lleguen solos, lo que obliga a iniciar expedientes para localizar sus datos y su familia, además de entrar en el sistema de protección de los Servicios Sociales.
Preguntada por una estimación del número de ucranianos no acompañados, la consejera respondió que la Junta desconoce ese extremo. "No tenemos ese dato ahora mismo pero estamos a disposición del Gobierno respecto a este tema", precisó.
En cuanto a la capacidad de las plazas de acogida, Isabel Blanco aseguró, según recogió la Agencia Ical, que será la que demande el Gobierno de la Nación. En este sentido, se activarán tanto los recursos de las propias entidades que habitualmente trabajan con los menores refugiados como Cruz Roja, Accem y Cepaim o bien a través de los propios centros de la administración autonómica. "Fuimos de las primeras comunidades en ofertar plazas para los menores extranjeros no acompañados que vinieron de Ceuta y Canarias, que ya están totalmente integrados y dentro del sistema de protección de la Junta, lo que implica que alguien les toca tutelar legalmente", recordó.
11 menores del Tiemblo
En el caso de los once menores ucranianos que están acompañados por tres adultos en un albergue del Tiemblo (Ávila), Isabel Blanco señaló que la Junta ha iniciado con los trámites administrativos como los expedientes de información y el traslado de la situación de los jóvenes a la Fiscalía. "Lo primero que hay que determinar es si estos adultos se hacen cargo de los menores o si tienen que entrar los Servicios Sociales a tutelarles", subrayó.
La consejera explicó que estos menores llegaron a España en dos grupos, una monitora con seis jóvenes a su cargo y un matrimonio que está con otros cinco, aunque la administración autonómica está en contacto con las familias de estos menores con edades comprendidas entre 7 y 17 años. "Antes de que acabe la semana, se les dará una solución en función del tratamiento que se les de", concluyó.