Casi dos meses después de que Rusia invadiera Ucrania, la población sigue huyendo desesperada de los bombardeos y las ruinas. Los más afortunados han conseguido empezar una nueva vida, al menos mientras dure el conflicto, lejos de los ataques y de los misiles. Otros tantos se acercan a las fronteras de los países limítrofes y un aún más abundante número de ellos todavía continúa en el país. Pero la situación allí es extremadamente complicada especialmente para asuntos tan básicos como alimentarse.
Es por ello por lo que La Red Global de Bancos de Alimentos (GFN) ha hecho un llamamiento para conseguir dinero con el fin de ayudar a las necesidades de los ucranianos. Para canalizar una respuesta eficaz, se ha creado un Fondo de Emergencia que ya se está gestionando a través de la Federación Europea de Bancos de Alimentos (FEBA).
Esta Federación agrupa a más de 300 Bancos de Alimentos de 29 países europeos. Gracias a esta red, la ayuda será distribuida a cada Banco de Alimentos de la zona en conflicto, así como a países limítrofes.
La Federación de Bancos de Alimentos de Castilla y León se ha unido a esta convocatoria para la recaudación de fondos con el fin de proporcionar alimentos de primera necesidad a los ucranianos.
El Español-Noticias de Castilla y León habla con Jesús Mediavilla, presidente de la Federación de Bancos de Alimentos de Castilla y León y del Banco de Alimentos de Valladolid, que nos explica el modo en que se gestionan estas ayudas. “En tiempos de crisis y de emergencia tan compleja como esta, la labor de los Bancos de Alimentos, al estar arraigados en las comunidades a las que sirven y poder movilizar a otras organizaciones lideradas localmente, puede ser decisiva para evitar una catástrofe humanitaria”.
En función de las necesidades de alimentos que tienen en estas zonas en conflicto, “se nos informa y se ajusta la cantidad que se asigna a cada país con arreglo a las personas que haya que atender”. Exactamente lo que hacen los 54 Bancos de Alimentos de España “es reunir ese dinero y entregarlo. Todas las aportaciones recaudadas se entregarán a la Federación Europea de Bancos de Alimentos”
Mediavilla confirma que “hasta ahora se han atendido todas las necesidades que nos han solicitado”, si bien remarca que es importante que las ayudas en este tipo de casos sean económicas: “No solo hacen falta alimentos, en el caso de los alimentos lo más apropiado es que lo compren ellos allí, porque de esta forma compran lo que ellos necesitan. Las costumbres y las circunstancias de cada país no son las mismas”. Y añade: “Aquí por ejemplo entregamos mucha legumbre, pero allí no forma parte de su dieta diaria, por tanto, lo más adecuado es que ellos compren los víveres que les hacen falta”.
El presidente de la Federación de Bancos de Alimentos de Castilla y León recuerda que hay una cuenta para todas aquellas personas que quieran colaborar. “Siempre lo recomendamos. A todos los que nos están diciendo que quieren entregar alimentos les decimos lo mismo: que el coste logístico de enviar alimentos es muy elevado, y al hacerlo de esta forma el coste logístico es cero”.
Cuando reciben alimentos requieren un orden y una planificación “mientras que si lo compran allí se homogeneiza todo. De esta forma se gestiona mejor y además se estandarizan todos los alimentos. Con toda la buena intención cada persona o cada familia dona lo que puede, unos entregan garrafas de cinco litros de aceite, otros donan botellas, unos llevan bolsas de medio kilo de macarrones, otros sacos de 5 kilos. De tal manera que si se compra allí directamente se abastecen de lo necesario con unas medidas estándar que facilitan el almacenado y la repartición”, lo cual “origina menos problemas a la hora de distribuirlo entre la gente necesitada”.
Además, existen otras muchas necesidades relacionadas con la organización: “también es imprescindible que se aprovisionen de los medios logísticos que les hacen falta para hacer las entregas, como carretillas mecánicas, camionetas, o naves para almacenar todo lo que llega a través de particulares o empresas”. De ahí la importancia de las aportaciones económicas en lugar de alimentos en estos casos. No obstante, toda ayuda es bienvenida.
Desde luego, con estos volúmenes de trabajo no se puede contar únicamente con voluntarios, “tenemos un equipo de técnicos muy buenos, gente titulada, expertos en logística y personas con mucho prestigio”.
Actualmente más de cuatro millones de ucranianos ya han abandonado su país. Se estima que a España han llegado aproximadamente 30.000, de los cuales unos 1.500 se han establecido en Castilla y León. Una parte de ellos han llegado acogidos por familiares, amigos o conocidos, pero otros muchos están siendo alojados por familias que altruistamente se han ofrecido a recibirles.
“En el caso de los ucranianos que ya se han instalado en Castilla y León, concretamente aquí en Valladolid, estamos recibiendo llamadas de familias que han acogido a ucranianos con toda su buena voluntad, pero ahora se están dando cuenta de que los costes de mantener a otra familia son muy altos y no los pueden soportar”. Pero el Banco de Alimentos no se queda atrás en la ayuda a estas personas. “Nosotros en este caso, como siempre hacemos, les derivamos a las entidades de reparto que tenemos y analizamos las circunstancias de cada familia. A todas las personas que nos lo solicitan, si cumplen con los requisitos que tenemos, se les atiende”.
Respecto a la actividad habitual que viene desarrollando el banco de Alimentos en Castilla y León, Mediavilla nos confirma que continúan trabajando con normalidad: “Ahora empezaremos las campañas de primavera y verano. Aún es pronto para confirmar la fecha, pero sobre junio comenzará la campaña con ASUCYL, la Asociación de Supermercados de Castilla y León, en la que participan todos los supermercados asociados, que se hará como todos los años, con donación en caja”. Para el presidente de la Federación de Bancos de Alimentos, de nuevo “es la mejor forma, puesto que facilita la gestión de las necesidades de compra y distribución de los alimentos”.
En cuanto a los objetivos de recogida que se marcan en los Bancos de Alimentos de Castilla y León, “normalmente se suelen cumplir, aunque pensamos que puede que este año haya menos donaciones porque aquí también nos está afectando la crisis y la guerra de Ucrania”. Pero añade que “queremos transmitir que no hay que desatender las necesidades de Castilla y León, es importante disponer de medios para poder aportar recursos a toda la gente que lo necesite aquí”.