La hostelería de Castilla y León protagoniza un apagón para visibilizar la "dura situación" por la que están pasando. Varios establecimientos de León, Salamanca, Segovia y ÁVila han apagado las luces y encendido unas velas durante cinco minutos para reivindicar el incremento de gasto energético que puede llegar a suponer una media de 1.500 a 5.000 euros anuales en las tarifas mínimas.
Según informa Ical, la gerente de la Asociación de Hostelería de León, Paula Álvarez, quien detalló que la imposición del mínimo básico de la luz ha tenido un gran aumento, más el consumo energético, la subida del IPC, el incremento de costes y lo "que vive hoy en día la sociedad".
La convocatoria ha tenido lugar en todo el territorio nacional bajo la convocatoria de Hostelería de España y pretendía hacer ver la "gran problemática producida por la crisis energética". El sector también ha querido aprovechar la ocasión para trasladar unas medidas que puedan hacer frente al incremento de los gastos puesto que a los hosteleros les dicen que "se quejan" pero afirman que no obtienen ninguna solución.
Dentro de las propuestas que han realizado está la revisión y modificación del cálculo de tarifas, eliminación de los peajes y la búsqueda de fórmulas de contratación adaptadas a la realidad del sector, la eliminación de penalizaciones, una rebaja de impuestos eléctricos, otorgamiento de avales públicos para que puedan acceder a compras de suministros renovables y promover que puedan existir subastas de contratación.
Los establecimientos "intentan soportar" estos aumentos y afirman que podrían llegar a "ver cerrar sus puertas" aunque, por ahora, es "más visible que en los comercios". Lamentan que al pasear por León cada vez hay más "locales vacíos, cerrados o en traspaso". Sin embargo, los hosteleros lamentan que siguen "luchando" y que cada vez están más "endeudados".