CCOO Castilla y León ha exigido al presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco que aumente los recursos técnicos y humanos para prevenir y luchar contra los incendios forestales, tras el terrible fuego que asola la Sierra de la Culebra en Zamora. El secretario de Acción Sindical, Salud Laboral y Medioambiente de CCOO de Castilla y León, Fernando Fraile, sostiene que "hay que profesionalizar las cuadrillas de extinción reconociendo la categoría de bombero forestal y desarrollando una labor preventiva durante los 365 días del año".
La Secretaría de Acción Sindical, Salud Laboral y Medioambiente de CCOO de Castilla y León lamentan los graves daños que está ocasionando el incendio a la vez que se "agradecen todos los recursos técnicos y humanos que trabajan en la extinción de incendios forestales, a todos y todas bomberos forestales que lo están combatiendo en primera línea, por su entrega, su esfuerzo y su generosidad". Desea a todos ellos que no sufran ningún daño personal.
Fernando Fraile también ha querido mostrar la solidaridad con la población de las zonas afectadas recordando que Castilla y León es un territorio eminentemente forestal, el 51% del total de la superficie de la Comunidad está catalogada como tal. Esto supone "un valioso patrimonio natural para la región que a su vez genera importantes beneficios ambientales, sociales y económicos". Por tanto la conservación y mejora de los montes es un proceso indispensable que debe servir para frenar las amenazas que se ciernen sobre los bosques, entre ellas los incendios forestales que cada año arrasan grandes superficies.
CCOO advierte que como se está viendo en los últimos años, la despoblación de las zonas rurales, la falta de estructuras de prevención en los montes y las elevadas temperaturas que se van superando verano tras verano debido al calentamiento global, están propiciando que cada vez sean más frecuentes los Grandes Incendios en nuestra comunidad autónoma (Sierra de la Paramera y La Serrota en 2021 en Ávila con más de 22.000 ha calcinadas), con los consiguientes daños ecológicos, económicos, personales, "así como el perjuicio que se ocasiona a la imagen de Castilla y León, que sale muy tocada, como una comunidad incapaz de defender sus montes y de proteger a la gente de sus pueblos, como si nuestro medio rural no tuviese demasiados problemas ya".
Fernando Fraile considera que Castilla y León debería contar con un operativo de prevención y extinción de incendios a la altura de las circunstancias, un operativo profesional, público y "que trabaje los 365 del año". Actualmente, "el operativo está precarizado en muchos aspectos", destacando la elevada temporalidad, pero también la falta de infraestructuras, de formación, y de reconocimiento económico a su labor. La Junta de Castilla y León apuesta desde hace décadas por un modelo que es único (por lo obsoleto) en España. Se trata de un operativo mixto, "muy barato, flexible, con predominio de la parte privada, en el que una vez finalizada la campaña, manda al paro al 65% personas de las cuadrillas", quedando el resto trabajando algunos meses más, con lo que la prevención de incendios es muy insuficiente, "dejando al monte vulnerable ante la casi segura aparición de incendios que sobrepasan la capacidad de extinción de nuestros medios".
El sindicalista aclara que "una de las razones de que sea un modelo barato es el abuso que hace de los trabajadores", especialmente de los integrantes de los Romeos (o cuadrillas de tierra), que cada verano, en lugar de permanecer en bases formándose o haciendo labores propias de bomberos forestales (que es lo que son), se dedican a realizar trabajos pesados en el monte las horas centrales del día, trabajos que deberían realizarse en otras épocas del año. Por ese motivo, "reivindicamos la aprobación de un Estatuto de Bomberas y Bomberos forestales, que recoja la formación, la capacitación, las funciones y conformar un operativo digno, profesional y suficiente".
En unas declaraciones que realizó Mañueco en su visita al incendio de Sierra de la Paramera y Serrota el pasado año, tras ver el daño sufrido, y que fue menor gracias a la intervención de las comunidades colindantes, del ministerio de Defensa y del Ministerio de Medio Ambiente, reconoció que tal vez haya que "repensar" todo esto, pues un año después, explica Fraile, "lo sigue repensando y mientras tanto nada cambia y los incendios continúan arrasando nuestra comunidad".
También en el incendio de la Sierra de la Culebra está interviniendo la Unidad Militar de Emergencias, los efectivos del Miteco, la guardia Civil y las comunidades autónomas colindantes, (Galicia, Madrid, Extremadura y Castilla-La Mancha), "entre otras cosas, porque el operativo de nuestra comunidad está al 50%, ignorando el riesgo extremo de incendio". Por ello, desde CCOO "creemos que los presupuestos autonómicos deben adaptarse para integrar los nuevos retos en materia de lucha contra los incendios forestales" sobrevenidos por el cambio climático, debiéndose incidir mucho más en la prevención.
Con la llegada de los nuevos fondos a las arcas comunitarias, ésta debería ser una de las cuestiones más acuciantes para solucionar. "Estamos ante una cuestión urgente" y así lo deberían contemplar los dirigentes autonómicos. Ha llegado la hora de "hacer caso a las reivindicaciones que Comisiones Obreras lleva pidiendo tantos años".