La Junta de Castilla y León ha dado a conocer hoy los resultados de los análisis del Centro Nacional de Medidas de Protección sobre unos guantes de nitrilo que la administración autonómica retiró del circuito sanitario tras unos primeros análisis cuyos resultados “no fueron concluyentes”, ha explicado hoy la consejera de Sanidad, Verónica Casado. En esta segunda investigación sobre los guantes bajo sospecha se ha determinado que “cumplen la normativa”, por lo que pueden ser usados sin ningún problema en los centros sanitarios. “Las partidas retiradas volverán a ponerse en circulación”, ha anunciado Casado, quien incide en que “la protección de los profesionales sigue siendo, como lo ha sido siempre, una de nuestras grandes prioridades”.
La crisis del coronavirus ha estado marcada por una constante sospecha sobre determinados materiales de protección para los sanitarios, tanto los adquiridos por la Consejería de Sanidad como por el Gobierno de España en el mercado internacional, fundamentalmente chino, que ha arrojado varios casos de materiales defectuosos o no homologados, lo que ha levantado ampollas entre los profesionales, que se han visto desprotegidos a la hora de realizar un trabajo de muchos riesgo. Tal es el caso de varios lotes de mascarillas FFP2 retirados.